Tras nuestro Karbo, el fútbol femenino vuelve a sentirse con fuerza en A Coruña

Inma Castañón

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

20 may 2019 . Actualizado a las 21:56 h.

Es fabuloso que surgiese de nuevo el fútbol femenino en A Coruña, después de todo lo que esta ciudad vivió en relación con este deporte. Y creo que con el apoyo del Deportivo, como del resto de los clubes profesionales en cada caso en la Liga Iberdrola, puede experimentar un fortalecimiento importante. La nuestra, la del Karbo, fue una época bonita en la que se, sin nada, se consiguió muchísimo. Aunque las jugadoras actuales no se acuerden de aquel Karbo, creo que podemos atribuirnos algo de mérito en cuanto al desarrollo del fútbol femenino, pero también lo tienen el propio Deportivo por querer recuperarlo y los propios medios de comunicación, por contribuir a que esa memoria no se pierda y que se refuerce tanto el arraigo en la ciudad como en vínculo entre el equipo, el club y los aficionados. El fútbol femenino vuelve a sentirse con fuerza en la ciudad de A Coruña, y este ascenso puede reforzar ese sentimiento y ese resurgir. Hay una diferencia enorme con respecto a nuestra época, en la que todo se sostenía por esfuerzos personales concretos, como los la directora del colegio Karbo, Carmen Borrego, nuestro entrenador, José Mañana (que ponían dinero de su bolsillo) y María Teresa Andreu, presidenta del fútbol femenino, que impulsó en Madrid tanto el deporte como la selección. Si ahora hay varias profesionales en el equipo, entonces nosotras nos financiábamos en parte con la venta de rifas. Eso ya lo dice todo. Yo misma pude haber sido profesional en Portugal o Francia, pero renuncié a ello porque no era ni comparable al profesionalismo que vive, por ejemplo, Vero Boquete. Yo me encontraba bien en el colegio y mis aspiraciones se colmaban simplemente con jugar. Viendo cómo está ahora el fútbol femenino, hoy en día ni lo hubiese dudado. Otro factor importante es el apoyo del público, que nosotras también tuvimos. Si verdaderamente quieres ser profesional te tienes que dedicar plenamente a ello y, de la misma manera que sucede en muchos casos en este Dépor, éramos niñas todavía estudiantes. Yo tendría unos 16 años. Esta es una situación habitual no solo en el fútbol, sino en todo el deporte femenino. Aunque la situación no es comparable y ha mejorado, todavía hay mucho que avanzar en este sentido. 

Inma Castañón fue la capitana del Karbo campeón de España