Destaca la «normalidad» con la que la plantilla del Dépor está viviendo la fase de ascenso a Primera, cuyo duelo final las enfrenta mañana al Femarguín
18 may 2019 . Actualizado a las 13:20 h.En menos de veinticuatro horas el Deportivo femenino se enfrenta a su reto final. Serán 18 las deportivistas que viajan hoy a Canarias e intentarán hacer historia colocando a un equipo con tan solo tres años de vida en la categoría reina del fútbol femenino.
Noventa minutos separan a las de Manu Sánchez de la gloria. El Femarguín canario espera mañana a las 12 horas en el Municipal de Arguineguín para el último duelo de la fase de ascenso a Liga Iberdrola. Encuentro en el que las blanquiazules partirán con ventaja tras la victoria por dos goles a cero conseguida en Abegondo.
El técnico blanquiazul, Manu Sánchez, y la jugadora Tere Abelleira trataron ayer de normalizar la situación que lleva viviendo el equipo estas últimas semanas después de realizar una temporada casi perfecta y sumar 28 victorias consecutivas.
«Estamos disputando algo que es muy importante para este equipo y para el club. Estamos viviéndolo con mucha ilusión pero tratando de darle normalidad y trabajando como el resto del año», dijo Manu Sánchez. La capitana blanquiazul corroboró las palabras de su entrenador y quiso añadir que esta última semana «se está haciendo un poco más larga que de costumbre» y que el equipo afronta el partido de mañana con «muchas ganas e ilusión».
Sánchez quiso destacar nuevamente la preparación psicológica que durante todo el año, y especialmente durante este último mes, recibieron sus pupilas: «El trabajo físico y táctico lo realizamos durante todo el año. Este último mes trabajamos más la cabeza que las piernas. Prestar un poco más de atención a las situaciones de estrés y ansiedad que producen este tipo de partidos».
El técnico deportivista no fía el partido de vuelta a la ventaja obtenida el pasado domingo en Abegondo, y afirma que «el objetivo es ganar el partido, independientemente de los goles que haya». Por eso el equipo saldrá al campo como lleva haciendo toda la temporada: «Nos gusta e intentamos entrar muy metidos en el partido. El domingo pasado fue importante y creo que condicionó el resto del partido».
Un campo que para Tere Abelleira no supondrá «ningún problema», ya que las blanquiazules, pese a jugar en hierba natural en casa, están acostumbradas a competir a domicilio en terrenos de césped artificial, y su racha de victorias da fe de ello.
Lo que sí echarán en falta será el apoyo de los más de mil deportivistas que acudieron a animar al equipo en los últimos encuentros en Abegondo. «Los últimos partidos fueron espectaculares. Recibir así el calor de la afición. Intentaremos darles la alegría desde fuera y ya tendremos tiempo de festejar aquí», afirmó el técnico deportivista.
Sin miedo a nada y una promesa por cumplir
«No tememos a nada. Si hacemos nuestro juego, el que llevamos haciendo todo el año, y confiamos las unas en las otras, no creo que salga nada mal», afirmaba ayer Tere Abelleira con respecto al partido de mañana. Palabras que secundó Manu Sánchez con prudencia: «Temer no tememos a nada, pero tenemos que ser precavidos y estar preparados para todo lo que pueda suceder».
Una victoria en el partido de mañana pondría la guinda a una temporada de cifras de récord y a un planteamiento como equipo que en menos de tres años ve como su aspiración última, el ascenso a Liga Iberdrola, está a solo noventa minutos de distancia.
«Cuando arrancas un proyecto intentas alcanzar los mejores objetivos posibles, y se tiene ilusión de conseguirlo de la forma más bonita posible», explicaba Manu Sánchez, que quiso destacar la liga conseguida por el equipo filial y su consecuente ascenso a Segunda División: «Le da un conjunto mucho más importante a todo el proyecto, y si conseguimos este partido que nos queda, a intentar ganar la Copa Galicia que es lo que nos falta».
«Si al principio de temporada nos dicen el recorrido que íbamos a llevar, todas lo firmaríamos», dijo Tere Abelleira. Un recorrido que las «sorprendió un poco», pero que considera «merecido» después del trabajo realizado por el cuerpo técnico y las jugadoras esta campaña. A algunas de las cuales veremos con un cambio de peinado si el Dépor consigue el ansiado ascenso: «Cris, Lía y yo dijimos que nos haríamos trenzas», rió la capitana. Y una promesa, hay que cumplirla.
