Exatleta, disciplina con la que defendió hace décadas el escudo del Deportivo, la vida de Fernando Vidal ha estado siempre a caballo entre el deporte y el puerto. Presidió el OAR de balonmano en su etapa más gloriosa, llegando a soñar con alcanzar la Asobal. Y, en el club de fútbol, suya es la responsabilidad de la reestructuración del fútbol base, con los lunares de un rendimiento bajo de algunas categorías, y el éxito de un Fabril que a punto estuvo de ascender a Segunda División la pasada temporadas.
Ahora regresa con la experiencia de la etapa anterior y con la serenidad de haber pasado un tiempo alejado y analizando la situación desde fuera