El exjugador del Alavés reconoce que su mentalidad ha cambiado gracias a su trabajo con un «coach»
26 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Christian Robert Santos (Puerto Ordaz, Venezuela, 1988) pasa página. Después de dos temporadas sin apenas minutos en el Alavés y seis meses cortados por el mismo patrón con el Deportivo en Segunda, ha cambiado de forma de pensar. Su terapia con un coach le ha valido para volver a ser feliz en los entrenamientos, ponerse en la piel de sus compañeros y acercarse de nuevo al técnico Natxo González. Este es el nuevo Christian Santos.
-¿Cómo de difícil fue la primera vuelta para usted?
-Bastante. Cuando no juegas sueles sufrir como jugador, pero últimamente entendí ciertas cosas y ese sufrimiento ya no me afecta. Tengo gente que me ayuda y lo veo de otra manera.
-¿Sirve para madurar un momento así?
-Sí, claro que sirve para madurar, pero la cuestión es que he pasado varias veces por esa fase, pero en ningún momento he aprendido. Hasta ahora. En ningún momento pude superarlo, porque me ha sucedido otra vez y he caído otra vez en ese sufrimiento y he decaído anímicamente. Pero hoy en día tengo ahí a alguien que me ayuda bastante y creo que llegó el momento donde finalmente aprendí cómo manejar esta situación. Y me está yendo bastante bien. En los entrenamientos me va genial, soy feliz, no depende de si estoy jugando o no. Eso es bastante importante.
-¿Cuál es el cambio que ha experimentado ahora? ¿Qué ha pasado, más allá de los 25 minutos que pudo jugar el domingo contra el Albacete?
-Entender a tus compañeros, a los que están al lado tuyo. Ahora comprendo cómo piensan y cómo sienten. Una vez entendido eso, ya no te afectan las decisiones que alguien toma o cómo alguien actúa. Eso es exactamente lo que estoy aprendiendo.
-¿Era antes más egoísta?
-No diría egoísta, porque de esa manera es cómo he llegado a tener éxito. Y no creo que eso de ninguna manera fuera egoísta. Fue algo más de encerrarse en una vía y no desviarse. Aunque quizá hubiera otros caminos.
-Ahora ve que hay más.
-Sí, y que lo importante es saber adónde vas.
-¿Qué importancia ha tenido su entrenador en esta nueva forma de encarar su carrera?
-Bastante. Nos reunimos y ahí es donde yo... Fue el primer paso que di y mostró que estoy entendiendo ciertas cosas. Por eso busqué el diálogo. Solamente para decirle que lo apoyo en sus decisiones, en lo que plantea, que yo estoy aquí para sumar, para apoyar al equipo y que si al equipo le va bien, a mí me irá bien.
-¿Le valió para redescubrir a su técnico?
-La cuestión es que si tú cambias, todos cambian. Es algo natural. Si tú cambias tu manera de ver a la gente, de alguna manera los demás lo reflejan. Sí. Veo todo mejor. El ambiente está mucho mejor. Hay buen ambiente y buen rollo, y me parece genial.
-¿No hubo siempre buen ambiente en el vestuario?
-Sí, pero últimamente no se estaban logrando victorias y con esto se notaban ciertas tensiones. Pero todo eso cambió rápido.
-¿Antes de esa reunión se planteó marcharse?
-Quizá en algún momento me llegó alguna fase débil, donde yo estaba reflexionando y viendo esa posibilidad. Pero pude tener esa cierta ayuda y para mi carrera es lo mejor que me ha podido pasar. Lo que he aprendido, si lo entiendo y lo comprendo, finalmente esta situación no me va a afectar más a lo largo de mi carrera.
-¿Está yendo al psicólogo?
-No, no es un psicólogo. Es un coach que trabaja con empresas y directivos de alto nivel.
-¿Lo buscó usted o fue el club el que se lo recomendó?
-No, fue coincidencia. Tengo un buen amigo, que he conocido aquí en A Coruña, y me dijo que tiene un amigo que le da servicios a jefes de empresas y ejecutivos, y que hace esa cuestión. Le planteó mi tema y le dijo que estaría encantado de hablar contigo y ayudarme. Nos vimos y hoy en día estamos mucho en contacto.
-A lo mejor si lo hubiera encontrado antes...
-Él me lo dijo también. Seguro que mi situación en el Alavés, o antes aquí hubiera sido de otra manera. Seguro.
-¿Se siente más importante?
-Sí, en cierta medida sí. Creo que nos encontramos en un punto en el que si todos sumamos, es más fácil.
«No me pueden contar el cuento de que fuera es más difícil y en casa más fácil»
El delantero espera que la mala racha fuera se rompa pronto.
-¿El Dépor necesitaba un cambio de sistema?
-Estábamos en una fase donde se nos hacía complicado. No teníamos muchas soluciones, sí mucha posesión, pero nos costaba bastante. Fue bueno jugar de esa manera, pero más anímicamente que otra cosa. En el entorno se notaba un ambiente diferente y eso favorece bastante.
-Les queda por alcanzar el rendimiento de Riazor también fuera de casa.
-Yo no pienso así. En todos los partidos se juegan 90 minutos, la pelota es redonda,... A mí no me pueden contar el cuento de que fuera es más difícil y en casa más fácil. Yo lo veo más objetivo.
-Pero lo que no puede negar es que los resultados han tenido poco que ver.
-Obvio. Pero son muchos factores. No puedes decir que es por esto. Quizá los viajes afectan anímicamente. Quizá no estamos tan bien. Hay que ver a partir de ahora, en las próximas semanas, cómo va todo y si sigue ese supuesto problema.
«Vivo las noticias de Venezuela con esperanza, es el primer paso para un cambio»
Aunque se crio en Alemania, Santos nació en Venezuela y es internacional por su país.
-¿Cómo está viviendo las últimas noticias?
-Con esperanza. Se está viendo que hay un cambio, y eso para mí es un avance en la situación, porque estaba bastante grave, y es el primer paso para ese cambio.
-¿Tiene familia allí?
-Sí, mi tía, un medio hermano, primos y primas.
-¿Qué le cuentan?
-De momento están tranquilos y esperando qué va a pasar. Todos estamos pendientes, tanto ellos como nosotros. Esperemos que haya un cambio pacífico y que el país eche para delante, porque el país no está bien.
-¿Teme la división entre partidarios de unos y otros?
-Sí, pero eso lo iremos viendo. Lo único que queda es esperar y tener fe de que todo salga bien.
-¿Cambia su percepción de cómo vivía la situación de Venezuela en Alemania o en España?
-No, los venezolanos que yo conozco todos queremos el cambio, no hay ninguno que esté feliz así.