Adrián y la efeméride mantienen viva la llama de la permanencia

Álvaro Vega

TORRE DE MARATHÓN

César Quian

Fin a las históricas rachas negativas del Deportivo, de Clarence Seedorf y de Florin Andone

09 abr 2018 . Actualizado a las 18:39 h.

¡Viven! Casi cuatro meses después, la afición deportivista ha vuelto a celebrar un triunfo (3-2) de su equipo, en esta ocasión ante un rival directo (Málaga CF) y en el que se presumía ultimísimo tren por la permanencia en la máxima categoría para la próxima temporada.

Abrió el marcador Lucas Pérez, que volvió a ver puerta justo una vuelta después en el campeonato, desde que anotara en el choque de ida frente al Málaga CF en La Rosaleda, allá por el mes de noviembre, y que llega de este modo a la treintena de dianas en Primera división. Justo antes del descanso niveló la contienda Diego Rolán, que en la segunda mitad firmaría su segundo doblete del presente ejercicio -ya lo hizo frente al Athletic en septiembre-.

Pero antes del segundo tanto de Rolán, Adrián López decidió que hoy era el día de espantar fantasmas. Hoy, un 6 de abril, fecha en la que el cuadro herculino ha resultado vencedor en sus seis últimos encuentros en Primera: en 1997 (1-0 al Zaragoza), 2002 (5-0 al Mallorca), 2003 (2-1 a la Real Sociedad), 2008 (1-3 al Racing), 2013 (3-2 al Zaragoza) y 2018 (3-2 al Málaga CF).

El delantero asturiano, autor del 2-1 y el 3-2, firmó su cuarto doblete en la Liga española, tras los conseguidos con el Deportivo en 2010/11 (ante Athletic y Sporting) y Atlético en 2011/12 (frente al Zaragoza). Y es que a Adrián se le da muy bien enfrentarse al Málaga CF, rival ante el que nunca ha perdido en sus doce enfrentamientos en la máxima categoría, acumulando entre todos ellos siete victorias y cinco derrotas.

Sus dos tantos y el consiguiente triunfo permitieron acabar con la histórica sequía del conjunto coruñés sin ganar (quince encuentros entre diciembre y abril, récord del club), estrenarse a Clarence Seedorf (no se convirtió en el primer técnico sin triunfos en sus nueve primeras citas ligueras al frente de la nave blanquiazul) y acabar con la racha de Florin Andone (sumaba dieciocho partidos sin celebrar una victoria, también máximo registro de la entidad herculina).