Cita con el Dépor de la remontada

TORRE DE MARATHÓN

GONZALO BARRAL

Tras un nefasto inicio de Liga el equipo coruñés se obliga a mejorar su rendimiento en Villarreal

07 ene 2018 . Actualizado a las 16:49 h.

El Deportivo acabó los amistosos. Apenas un puñado de sus partidos, en este primer tercio de temporada ya transcurrido, invitaron a pensar en un equipo comprometido al cien por cien en el objetivo común de los tres puntos. Agotado el manual de excusas, en entredicho sus supuestas figuras y tras una semana de catarsis, el equipo coruñés visita a un Villarreal de postín, consolidado otro campeonato más en la lucha por Europa, pero afectado en este momento por las bajas y las dudas tras la venta de Bakambu, su mejor futbolista. Un panorama esperanzador para los blanquiazules que, en cualquier caso, ya no están en disposición de escoger sus remontadas, sino obligados a recuperar el pulso de la Liga cuanto antes.

Nada resultaría mejor para los jugadores del equipo coruñés que abrir el 2018 con una actitud positiva y un mucho mejor rendimiento, pero, sobre todo, con una victoria que establezca una tregua entre todos y, principalmente, consigo mismos. No hay vestuario ni grupo de trabajo capaz de soportar durante mucho tiempo la presión y el enrarecido ambiente de la última semana. Solo los tres puntos de esta tarde establecerían las bases de una paz a ratificar definitivamente en las próximas semanas, pero cuya llegada se hace imprescindible.

El equipo de Cristóbal está obligado a espabilar sin Lucas, que no se ha recuperado de las molestias que padecía en la espalda, y con muchas dudas sobre el planteamiento. Todo indica que la baja del delantero hizo trizas los planes del técnico de saltar al césped del estadio de la Cerámica con dos referencias atacantes. Solo Andone jugará en punta, mientras el técnico catalán se habría decantado finalmente por reforzar el centro del campo con la presencia de Mosquera como tercer mediocentro. La baja de última hora de Valverde, aquejado de una amigdalitis, limpia de mediocentros el banquillo y deja sin recambio claro cualquier contingencia que se pueda producir en esta posición del esquema blanquiazul.

Sin embargo, más allá de los nombres, el deportivismo desea comprobar la competitividad de su equipo. Antes que nada, este debe dar un salto de gigante en el rendimiento defensivo. No habrá recuperación posible, si el equipo coruñés sigue encajando goles con tanta facilidad como ocurrió en el derbi. Entonces, pese al dominio, los errores propios y la efectividad rival firmaron una derrota sin paliativos.

Los coruñeses también llevan dentro una versión brillante en retaguardia, como demostraron hace poco contra el Leganés. Quizá resulte menos vistosa, pero sí más comprometida y solidaria. Sería a partir de ahí cuando el Dépor podría reclamar confianza. Solo así podría citarse con una remontada imprescindible en la clasificación.

Albentosa, Mosquera y Andone en el once

Respecto al derbi, donde Cristóbal alineó un sistema 4-2-3-1, todo indica que el Deportivo jugará hoy con un 4-3-3 caracterizado por los tres mediocentros que presentará en el eje del equipo. Así, en cuanto a nombres presentará tres novedades: Albentosa sustituirá a Schär, suspendido por acumulación de amonestaciones, Mosquera reforzará el mediocampo, donde entonces jugó Çolak como mediapunta; y Andone ejercerá como referencia atacante en lugar de Lucas.

Albentosa y Mosquera regresan a la alineación deportivista por primera vez desde el empate contra el Athletic de Bilbao. Ambos fueron señalados por su rendimiento en aquel encuentro, cuando el capitán fue sustituido en el descanso y el central tuvo que aguantar las críticas de la afición. Para el central este será su cuarto partido como titular en Liga (también había jugado la segunda parte del choque de Málaga), mientras Mosquera afrontaría el quinto de su cuenta, pues apenas jugó desde el inicio las tres primeras jornadas y el referido de Riazor, así como minutos de suplente en otros cuatro. En el caso de Andone, se trata de su primera titularidad desde la llegada de Cristóbal al banquillo de Riazor.