El Deportivo quiere un cambio radical

Pedro José Barreiros Pereira
p. barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

GONZALO BARRAL

El club desea introducir numerosos movimientos en el equipo, pero se ve limitado por el tope salarial

04 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las próximas semanas levantarán un auténtico huracán en el Deportivo, si se cumplen las expectativas del club. Más allá del impacto provocado por la salida de Richard Barral, la decisión de forzar la marcha del que fue director deportivo revela la firme decisión de someter todo a un debate interno. Tres permanencias consecutivas salvadas por los pelos y una primera vuelta prácticamente completada con el resultado de reencontrarse en puestos de descenso llaman a replantearse los principios que hasta ahora habían regido la política deportiva. Tino Fernández y su consejo afrontan de forma personal la difícil misión de virar el rumbo en mitad de la temporada, pero creen firmemente en la necesidad de renovarlo todo. Están decididos a tomar decisiones radicales para que el club salga reforzado y volver luego al punto de partida con renovadas fuerzas.

a tres bandas: ¿qué debe hacer el dépor en el mercado de fichajes?

Nadie se salva de esta premisa, pero el foco se centra ahora en una plantilla muy por debajo de las expectativas en cuanto a resultados y competitividad. El primer problema a regatear es el de la disponibilidad financiera. Cualquier cambio estará condicionado por el dinero, y más cuando se plantea dar un vuelco radical a un equipo que se ha pasado estos meses de fiasco en fiasco. Las intenciones pasan por que los cambios sean significativos y de calado, pero todo dependerá de la disponibilidad económica, lo que podría acabar por reducirlos. En cualquier caso, la mayor transformación afectará al espíritu que moverá todo: la pretensión de que la calidad se equilibre con la agresividad y la lucha. No se trata de pasar de un perfil de futbolista a otro opuesto que descarte el talento. Pero aquellos que deseen convertirse en los referentes de esta plantilla compaginarán ambos aspectos que, ahora sí, se valorarán por igual.

Las intenciones, siempre pendientes de las posibilidades financieras, pasan por reconfigurar la plantilla actual y pugnar por salvar la temporada de la mano de un Dépor con una nueva columna vertebral. En función de los fondos económicos con que se cuenten, se busca un nuevo portero, un lateral derecho defensivo, un mediocentro de brega y hasta podría llegar otro delantero. La posición bajo palos lleva en entredicho desde el arranque de la temporada. La recuperación de Rubén no ha acallado la necesidad de hallar un nuevo guardameta. Los nombres del gallego del Espanyol Diego López y el brasileño Rafael Cabral, del Nápoles, figuran en la agenda.

También se peina el mercado en pos de un lateral derecho de un perfil distinto a los de Juanfran y Valentín. Ambos inciden en ataque, pero el refuerzo destacaría por su trabajo defensivo. Esta misma cualidad primará en el mediocentro por el que suspira el club. Su llegada insuflaría brega, agresividad y afán competitivo al corazón mismo de la alineación. El giro radical incluso puede afectar a la delantera, donde los goles de Lucas y Andone se hacen de rogar. El salida del rumano abriría la puerta a la llegada de un nuevo atacante.