Un Dépor de dos velocidades

TORRE DE MARATHÓN

César Quian

26 nov 2017 . Actualizado a las 14:19 h.

En los días difíciles, afloran las diferencias entre los futbolistas. Condicionado por cuatro bajas de verdad, el Deportivo se volvió contra el Athletic un equipo de dos velocidades. Mientras peloteros como Schär, Cartabia y Adrián lucen listos para llevar al equipo a donde la afición exige y el club quiere, otros como Navarro, Albentosa y el Mosquera escondido de ayer complican pensar en algo más que la dichosa zona entre el decimocuarto y el decimoséptimo. Rubén y Lucas acabarán dando puntos. Borges y Valverde cuentan con el crédito de haber sido dos de los futbolistas más regulares del primer tercio de liga. Y todavía falta saber si Juanfran terminará pareciéndose al del curso pasado.

Al Dépor se le espera todavía para ese rendimiento continuo reclamado por Cristóbal, que ya armó un equipo reconocible, pero que terminará sonando más afinado. En el verde parece que los futbolistas solo terminan subiendo una marcha más cuando el marcador aprieta. Otra vez dos velocidades. Herencia de un pasado de complacencia en el que valía con ir tirando y agarrar la salvación de cualquier manera. Pero los meses de agobios hasta agarrar una dramática salvación con esta plantilla ahora ya no llegan. En el alterno intercambio de golpes y fases de dominio ante el Athletic, como en Málaga y tantos partidos anteriores, el Dépor solo se sacude de verdad la parsimonia cuando el resultado le exige. Aunque también encuentra capacidad de respuesta en lugar de venirse abajo como hace no tanto tiempo. El Dépor de Cristóbal acelerará con margen para trabajar, pero todavía necesita ajustar detalles.