La junta directiva no acaba de dar estabilidad al inquilino del banquillo
25 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La asignatura pendiente del Deportivo que preside Tino Fernández. Encauzada la parcela económica, la junta directiva que rige los destino de la entidad deportivista desde enero del 2014 no acaba de dar estabilidad al inquilino del banquillo, al encargado de dirigir el proyecto desde el césped. El primer despido llevó el nombre de Fernando Vázquez. El entrenador gallego, que había llegado con Lendoiro en la presidencia, consiguió devolver al equipo a Primera y con ello se ganó una renovación que, finalmente, no llegó a producirse.
A pocos días de arrancar la pretemporada 2014-15 fue despedido de forma fulminante tras realizar unas declaraciones que mostraron la escasa sintonía con el club por cómo se estaba confeccionando la plantilla. En su lugar llegó Víctor Fernández, un entrenador al que le tocó lidiar con una plantilla construida con muy pocos recursos económicos y en la que primaban los jugadores cedidos. El técnico maño fue destituido a 8 jornadas del final, y sustituido por Víctor Sánchez del Amo, en la que fue el estreno como primer entrenador del exjugador del Dépor.
Del Amo salvó la categoría y dirigió al Dépor durante toda la campaña 2015-16. Tras dirigir al equipo coruñés en 46 partidos de Liga (9 triunfos, 23 empates y 14 derrotas) y serle ampliado el contrato, fue despedido el 30 de mayo del 2016, con el Dépor en Primera, pero con un vestuario deteriorado. La apuesta por Gaizka Garitano finalizó el 26 de febrero del 2017 (5 victorias, 9 empates y 13 derrotas) tras caer el Dépor (4-0) con estrépito en Leganés. Completó el curso Pepe Mel, que acabó ayer su etapa en el Dépor con 4 victorias, 4 empates y 9 derrotas. Turno para Cristóbal Parralo, el segundo debutante en un banquillo de Primera y el sexto entrenador desde enero del 2014.