El defensa se toma con paciencia la decisión sobre su futuro
16 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Tercer partido en tres días y otra hora y media con la portería a cero. Es cierto que los rivales militan todos en Tercera, pero el Deportivo ha conseguido minimizar las ocasiones del rival en todos los encuentros. Entre los responsables del éxito defensivo está uno de quienes ayer pasaron por la zona mixta tras el duelo con el Silva. Róber ha vuelto a casa después de una excelente campaña en el Levante que sin embargo no parece garantizarle un puesto fijo en el plantel blanquiazul. El propio central dejó en el aire su continuidad. «Mi futuro no está claro. De momento estoy aquí entrenando y dándolo todo, intentando hacerme al puesto», manifestó. Su intervención prosiguió por los mismos derroteros: «Estoy abierto a todo lo que pase. Estoy tranquilo. Soy una persona muy tranquila y no siento ninguna presión». «El año pasado fue muy bueno», recordó tras evaluar un choque «típico de una pretemporada, con buenas sensaciones de equipo y practicando cosas. Vamos ganando físico que es lo más importante».
Tras él acudió a zona mixta uno de los capitanes del Deportivo, el coruñés Pedro Mosquera. En su opinión, la cadena de encuentros «está siendo una buena toma de contacto de principio de pretemporada». Ayer Mel optó de nuevo por un 4-1-4-1, aunque según Mosquera el técnico «irá haciendo pruebas con varios sistemas». Tanto en Arousa como en la cita con el Silva, a él le tocó desenvolverse por una zona más adelantada respecto a la de enganche con la zaga que ocupó en Vilalba, donde se sintió «más cómodo». «Es una posición a la que me tengo que adaptar, pero hoy me sentí más cómodo que ayer», reflexionó el centrocampista. Se refirió también al buen papel de los fabrilistas: «Están haciéndolo bien, peleando, y cuantos más canteranos haya en el primer equipo, mejor».