El día de la marmota en Villarreal

Alexandre Centeno Liste
alexandre centeno A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

El Deportivo vuelve a jugarse la permanencia en la penúltima jornada en casa del submarino amarillo

14 may 2017 . Actualizado a las 18:45 h.

Hace hoy un año, el Deportivo despedía en Riazor una vergonzosa temporada empeorada la víspera con una surrealista comparecencia pública de Víctor Sánchez del Amo en la que arremetía cruel e injustamente contra Luisinho y Alberto Lopo. El ya exentrenador del Betis sorprendía con esa actuación un día antes de recibir al Real Madrid y gracias a que el domingo anterior sus jugadores habían echado el resto en Villarreal y asegurado la permanencia.

En una temporada llena de sobresaltos, con un meritorio inicio y un pésimo desenlace, la escuadra blanquiazul llegaba a Villarreal en la penúltima jornada con la obligación de ganar para no tener que rezar y estar pendiente de lo que podía suceder en otros campos. Casi un año después, los coruñeses vuelven a la capital de la cerámica, en semejante tesitura. Pero esta vez no estará enfrente un equipo lleno de suplentes, que días antes había quedado eliminado de la Liga Europa. Esta tarde (20 horas, beIN LaLiga) aguarda un Villarreal que se juega el billete continental sin necesidad de previa. Tiene solo un punto más que la Real Sociedad y el Athletic Club de Bilbao, sus inmediatos perseguidores. Si, como se espera, el Barça gana la Copa, los tres disputarán la Liga Europa, pero el último tendrá que comenzar antes. Además, la escuadra que prepara Fran Escribá podría tener una pequeña opción de Champions, si gana los dos partidos que le quedan y el Sevilla los pierde.

«Obvio, la situación me recuerda un poco a la vivida el año pasado. Pero creo que en aquel momento era incluso peor. Porque la temporada había sido muy rara, había habido muchos problemas en el vestuario. Habían salido cosas en público... Y la afición estaba enfadada, con razón, porque no pudimos darle ni una alegría en todo el año», recuerda Jonás Gutiérrez, uno de los protagonistas de aquel encuentro, actualmente en el Defensa y Justicia argentino.

Las palabras del futbolista sudamericano se ven refrendadas por los números. Aquel partido que los gallegos ganaron 0-2, con goles de Fayçal Fajr y Lucas Pérez, llegó en un momento en el que el Deportivo solo había sumado una victoria en los 22 duelos anteriores.

Responsabilidad

Pero en una semana todo cambió. El equipo se mentalizó y logró el objetivo. «La verdad es que no recuerdo nada diferente a las otras semanas. Lo único, que sabíamos que no podía pasar de ese día. El último partido era contra el Madrid y éramos conscientes de que iba a ser mucho más complicado. El hecho de que el Villarreal no se jugara nada también nos ayudó. No salieron con mucha tensión», recuerda el Galgo.

«En este tipo de situaciones -prosigue- hay vestuarios en los que hay conjuras o cosas así. El año pasado no hacía falta. A pesar de los líos que hubo, todos éramos conscientes de que no habíamos dado la talla y que teníamos que darle una alegría a esa afición que tan bien se había portado. Por eso, no hizo falta ni vídeos, ni charlas diferentes... Solo que cada uno reflexionara y saliera a darlo todo. Como así fue», justifica.

Y con esa experiencia se atreve a apostar por el Dépor para esta jornada: «Lo estoy siguiendo bastante. Con el cambio de entrenador, pensé que estaba todo arreglado. Tuvieron un buen inicio de la nueva etapa. Pero al final están sufriendo más de lo esperado. De todos modos, creo que el equipo se va a mantener, ya sea ganando o a costa de otros. Pero se salvará».

«Vamos allí a ganar», asegura Mel, que no quiere jugársela en Riazor

Pepe Mel no quiere sorpresas. El entrenador blanquiazul desea dar por zanjada la permanencia en Villarreal. Teme que un mal resultado podría poner contra las cuerdas al Dépor y trata de evitarlo. «Es el partido definitivo. Nos lo tenemos que tomar así. También en el pasado lo tomamos así, pero el devenir fue difícil. Tenemos que ganar en Villarreal. Vamos allí a ganar. Dejarlo para más tarde sería complicarnos la vida aún más. Y no queremos», explicó tras la última sesión preparatoria de la semana.

Tanto se juega el Dépor en el estadio de La Cerámica y tan concentrada quiere el técnico a toda la expedición que ya advierte de que no permitirá que nadie esté pendiente de lo que a la misma hora sucederá en Ipurúa, en donde el Sporting se enfrenta al Eibar. «Me molestaría ver a alguien pendiente de Ipurúa. Porque eso te merma la atención. Dependemos de nosotros solos y debemos pensar en eso. Si, al final, no conseguimos el objetivo, pues habrá que mirar que pasó en Éibar. Pero espero que eso no haga falta». No obstante, asume que la afición sí esté atenta al campo vasco y que confíe más en un triunfo del Eibar que del Dépor: «Si es así, será porque nosotros les hemos dado razones para ello. Lo dije el primer día, el público reacciona según las cosas que suceden en el campo. Cuando el equipo conecta, el público conecta con ellos. El día del Espanyol fue un ejemplo; nada que decir, a lo mínimo, les arroparon. Si hay esa sensación desde fuera será porque les hemos dado motivos», sentenció.

Un empate sería suficiente si el Leganés puntúa en San Mamés

El Deportivo tiene claras las cuentas de cara a la jornada que se disputará a partir de las ocho de la tarde: una victoria en el estadio de La Cerámica le garantizará estar un año más en Primera División. Independientemente de lo que suceda en otros campos, si los blanquiazules suman los tres puntos en Villarreal, tendrían la permanencia matemáticamente lograda.

Pero no es la única manera en la que hoy sábado puede firmarse la salvación del Deportivo. La más sencilla es que el Sporting no logre el triunfo en su visita a Ipurúa. Cualquier cosa que no sea una victoria gijonesa en Eibar habrá salvado tanto al Deportivo como al Leganés. Pero incluso con una victoria sportinguista, si el Deportivo logra un empate y el Leganés puntúa en San Mamés, también le llegaría a los futbolistas que prepara Pepe Mel. Sin embargo, el hecho de que el Athletic se esté jugando la clasificación para disputar la Liga Europa sin necesidad de previa, da a los bilbaínos el cartel de favorito frente a la escuadra pepinera.