La depresión del Deportivo tampoco encuentra consuelo en la Copa
TORRE DE MARATHÓN
El equipo coruñés cae ante el Betis con otra gris exhibición a pesar de recuperar a Joselu dos meses y medio después
30 nov 2016 . Actualizado a las 01:23 h.El Deportivo volvió a tener más ocasiones que el rival, recuperó a Joselu Mato dos meses y pico después, dio la alternativa a Álex Bergantiños, agitó su esquema para encontrar nuevos caminos... Pero la depresión de la Liga se contagió al estreno de la Copa del Rey y al Betis le bastó una ocasión y media para doblegar a los coruñeses (1-0), tan esforzados como poco brillantes, a los que no les bastaron los destellos de Carles Gil y los remates francos de Sidnei y Joselu para, al menos, un empate que abriese más la eliminatoria y, sobre todo, diese algo de confianza a un grupo que la necesita con urgencia.
La Copa del Rey era una oportunidad, según Garitano, para encontrar motivos para ilusionarse con este Deportivo golpeado en la moral y supurante en lo futbolístico. Obligado por la enfermería, el equipo coruñés plantó un once muy reconocible respecto al de la Liga, aunque desplegado con tres centrales y dos carrileros en busca de la profundidad por banda. En busca, en general, de dar señales de vida en una temporada que ya está puesta cuesta arriba. Pero ni el sistema, ni la aparición como titular de Carles Gil y sus ideas más diáfanas que sus compañeros, ni el estreno aclamado por el deportivismo de Álex Bergantiños alegraron la cara a un equipo deprimido, que lo intenta con tanta voluntad como escaso éxito.
Al Betis, con sólo tres nombres repetidos respecto a la última jornada de Liga y con Rubén Castro y Adán (sus mejores jugadores) descansando en la grada, le bastó con dos carreras de Durmisi para desequilibrar el partido. También parado en tres centrales, el grupo de Víctos Sánchez del Amo necesitó una jugada y un grave error del Dépor para marcar y asustar. A los 19 minutos, Durmisi le dio a Juanfran de su medicina y Sanabria, solo entre centrales, apenas colocó la cabeza en la dirección adecuada para hacer el 1-0. Poco después, un despiste de Mosquera abocaba al Dépor al 2-0, que evitó in extremis Luisinho desviando el remate a las redes de Felipe Gutiérrez.
Así, en dos chispazos, el Betis cambiaba el ritmo a un partido jugado al trote, sin desborde, sin jugadas distintas, apenas alegrada la vista con los giros y la actividad de Carles Gil, más interior que jugador de banda. El Deportivo carecía de toda profundidad y juego entre líneas, con Marlos naufragando como segundo punta y Andone completamente desconectado del juego. Amasaban la posesión Bergantiños y Mosquera pero apenas avanzaban si conectaban con Gil. Sólo un disparo lejano de Juanfran bien rechazado por el gallego Dani Giménez alteraba el tedio del juego blanquiazul. Y, a pesar de todo, pudo encontrar el empate a la media hora, cuando un córner combado con mimo por la zurda de Carles Gil encontró a Sidnei completamente desmarcado. El brasileño cabeceó fuera con todo a favor, por apenas un palmo.
De ahí hasta el descanso, y en realidad también tras él, el Deportivo fue un ejercicio de impotencia con la pelota y tembleque sin ella, por más que el Betis apenas amenazase con media carrera de Sanabria. Garitano optó por Guilherme en lugar de Mosquera para arrancar el segundo acto, cuyo desarrollo transitó por los mismos renglones sin inspiración. Pidió un tibio penalti Luisinho por la carga de Piccini antes de que, a 25 del final, Joselu reapareciese tras dos meses y medio de lesión. Formó junto a Andone en el ataque, y su sola presencia dio algo más de pujanza al Deportivo, muy necesitado ya de cualquier suplemento.
El Betis se estaba arriesgando a un castigo exagerado en forma de empate porque apenas tenía la pelota, y la hierba del campo de Rubén crecía con calma encontraste con el trasiego de la otra mitad. Por inercia y algo más de presencia de las bandas coruñeses, llegaron las ocasiones. Primero, Andone buscó la rosca desde el pico izquierdo del área. Y después, Joselu cabeceaba un centro de Luisinho cruzado a milímetros del palo izquierdo, en la mejor ocasión del Dépor en el segundo acto.
Ahí se quedó el discreto toque a rebato del equipo coruñés, que pidió otro penalti por un empujón de Piccini a Andone, con el rumano de nuevo en la línea aislacionista del arranque de temporada. El resultado no cierra el debate de la eliminatoria, que se decidirá el miércoles 21 de diciembre en Riazor, pero el Dépor, más que argumentos para la Copa, los necesitaba para su confianza. Y en el Villamarín tampoco los encontró.
Ficha técnica
1 - Betis: Dani Giménez; Piccini, Mandi, Donk, José Carlos, Durmisi; Darko Brasanac (Fabián, m.86), Jonas Martin (Bruno, m.64), Felipe Gutiérrez; Sanabria (Joaquín, m.64) y Álex Alegría.
0 - Deportivo: Rubén Martínez; Albentosa, Sidnei, Fernando Navarro; Juanfran, Álex Bergantiños (Borges, m.75), Mosquera (Guilherme, m.46), Luisinho; Carles Gil, Marlos Moreno (Joselu, m.68); y Florin Andone.
Gol: 1-0, M.19: Sanabria.
Árbitro: Ricardo de Burgos Bengoechea (Comité Vasco). Amonestó a los locales Jonas Marti (m.35) y Darko Brasanac (m.86) y a los visitantes Álex Bergantiños y Luisinho (m.79).