El Deportivo gana en Villarreal y pone final feliz a su agonía

Miguel Piñeiro Rodríguez
Miguel Piñeiro LA VOZ / REDACCIÓN

TORRE DE MARATHÓN

El equipo coruñés firma la permanencia matemática en Primera división y su segundo triunfo de la segunda vuelta con golazos de Lucas y Fayçal Fajr

09 may 2016 . Actualizado a las 00:15 h.

El Deportivo esbozó media sonrisa en El Madrigal. Ni con otro año más en la élite ya en el bolsillo, el objetivo de la temporada logrado antes de tiempo pero tras un sufrimiento innecesario, no parece que la cosa esté para muchos festejos en el seno del equipo coruñés, que ganó su segundo partido de la segunda vuelta en Villarreal, su primera victoria lejos de Riazor desde el 28 de noviembre, datos que dan fe del desastre que estuvo cerca de llegar. El triunfo [0-2 | Así lo contamos] con golazos de Fayçal Fajr y de Lucas Pérez en cada período certifica la permanencia matemática en Primera división un año más, y sobre todo el final feliz de una agonía de semanas que amenazó con poner patas arriba medio año ilusionante.

Tantas veces escuchó el Dépor en esta segunda vuelta que tal partido o tal jornada era una final que esta vez no tuvo más remedio que creérselo. Convulsionado por los malos resultados, por un ambiente de descomposición acelerada las últimas semanas por varios conflictos abiertos en el vestuario y con el futuro del entrenador cada vez más lejos de Riazor, el equipo se puso la máscara de solidez, buscó la fórmula que le dio el éxito hasta finales de noviembre y trató de buscar la flaqueza mental y de fuerzas de un Villarreal lastimado por la eliminación europea. Víctor dio la posesión al submarino amarillo, buscó las galopadas de Lucas y la chispa de Fede, y el Dépor le respondió con un triunfo tan necesario como tardío.

Con Luisinho en el destierro y sin Borges, Víctor puso a Juanfran a pierna cambiada y recuperó la figura jerárquica y simbólica de Bergantiños, actor terciario en el último tercio de Liga. El Dépor se plegó en su campo con un 4-1-4-1 cuando no tenía la pelota, es decir, casi siempre. Esperaba en su campo la oportunidad de dar un picotazo y confiarlo todo a su andamiaje defensivo. La cosa parecía salirle bien al Dépor de inicio, cuando Laure ponía un centro a la frontal del área y Luis Alberto voleaba al poste. Poco después, Lucas encontraba el espacio para otra carrera, y permitía que el gaditano recortase y chutase tibio en el área.

Había poco ritmo de inicio porque el Dépor no quería la pelota y el Villarreal tardaba en reajustarse. Con el titubeante Barbosa bajo palos, Bonera en el centro de la defensa y un trío atacante totalmente novedoso, el equipo de Marcelino tardó en darle velocidad al juego. Cuando lo hizo, Samu Castillejo, Adrián López y Leo Baptistão se movieron con habilidad, dejando a Sidnei y Arribas sin referencias, cayendo a bandas y obligando a Cartabia y Luis Alberto a un esfuero extra en las ayudas. El Dépor estuvo 20 minutos metido en su campo y sin entrar apenas en contacto con la pelota. Cuando lo hacía, solía buscar un pelotazo para Lucas, que aunque forzó una amarilla a Bonera, desperdició su gran ocasión con un balón de Mosquera a espaldas de los centrales locales, que no logró dominar ante Barbosa.

JOSE JORDAN | Afp

El Villarreal llegaba con cierta facilidad al área del Dépor. Baptistão encontró a Manu en un disparo y en el segundo voleó fuera por poco el centro de Adrián. Pero el plan de Víctor Sánchez encontró el premio a la media hora. Después de una posesión larga que se permitió el cuadro coruñés para coger algo de aire, Fayçal Fajr invirtió el juego hacia Fede Cartabia. El argentino retuvo la pelota y devolvió para el franco marroquí en la frontal. Sin pensárselo, el ex del Elche la puso de primeras en la escuadra. El golazo desnudó la realidad del Dépor: una tibia celebración sobre el campo de un tanto trascendental y de gran belleza.

Estuvo cerca de ampliar el equipo coruñés con Fede Cartabia, de nuevo rápido y punzante en las pocas ocasiones que tuvo de encarar. Se fue de Rukavina con habilidad y velocidad y le peleó cuerpo a cuerpo al gigantón Víctor Ruiz para forzar la parada de Barbosa. Pero un golpe en el tobillo antes del descanso frenó su aportación. La echó de menos el Dépor, que se quedó sin una vía de escape para resistir en el segundo acto el asedio del Villarreal, aunque fuera por inercia.

El equipo de Marcelino, intenso pero lo justo, pudo empatar antes del intervalo con el tiro de Adrián repelido por Manu y la rapidez de Laure evitando que el rechace lo aprovechase Baptistão. Pero en la reanudación se vio al Deportivo en su mayor exponente: bien metido en su campo, sin conceder llegadas a pesar del dominio local, y con un arma de destrucción masiva en la recámara. Lucas Pérez cumplió con su misión para hacer un 0-2 que llevaba el alivio máximo a la hinchada blanquiazul. Un balón despejado desde campo propio era una presa propicia para el coruñés, que retrató a Bonera en la carrera, se plantó ante Barbosa y puso la pelota en la escuadra.

Esos 17 pequeños milagros de Lucas, por mucho que en la segunda vuelta fueran menos frecuentes, le han dado la vida a un Deportivo que llegó con la lengua fuera al tramo final del campeonato. El Villarreal sacó del banquillo a la artillería (Bakambu, Denis Suárez y Jonathan Dos Santos) y se lanzó a por un gol que abriese el partido. Al Dépor dejó de interesarle lo que ocurriera en el campo contrario, el balón apenas una circunstancia con la que lidiar mientras los minutos fueran pasando.

Pudo matar el partido con un largo esprint de Luis Alberto, pegado a la cal de la banda izquierda, hasta llegar al área y perfilarse par su diestra. Su tiro rozó en un defensa y la parábola casi sorprende a Barbosa. Poco después, Manu se tiraba a los pies de Baptistão para evitar un gol del Villarreal que hubiera puesto sal al último cuarto de hora. Pero esta vez no hubo sufrimiento ni sobresaltos, y el Dépor pudo amarrar la victoria que le permite vivir desahogado la última jornada de Liga y hacer con más frialdad desde ya el análisis de un año completamente bipolar.

0 - Villarreal: Barbosa, Mario, Bonera, Víctor Ruiz, Rukavina, Bruno, Trigueros (Dos Santos m.66), Samu García, Samu Castillejo (Denis Suárez m.60), Adrián (Bakambu, m.60) y Baptistao.

2 - Deportivo: Manu Fernández, Laure, Arribas, Sidnei, Juanfran, Bergantiños, Fayçal Fajr, Mosquera, Fede Cartabia (Jonás m.11), Luis Alberto (Cani, m.84) y Lucas Pérez (Oriol Riera, m.90).

Goles: 0-1, m.32: Fayçal Fajr. 0-2, m.56: Lucas Pérez.

Árbitro: Estrada Fernández (comité catalán). Mostro tarjetas amarillas a los locales Bonera, Trigueros y Víctor Ruiz y al visitante Arribas.