El Deportivo prevé que Oriol Riera pase reconocimiento médico el lunes

Pedro José Barreiros Pereira
Pedro Barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

Oriol Riera, en su hotel en A Coruña
Oriol Riera, en su hotel en A Coruña CESAR QUIAN

El fichaje del delantero está pendiente de los últimos flecos

04 ene 2015 . Actualizado a las 23:45 h.

Oriol Riera ya se encuentra en A Coruña. Llamado a ser el goleador que el Dépor necesita para agarrarse a la permanencia, pasa revisión médica esta mañana y firmará su nuevo contrato. Compartirá demarcación con Toché (autor de dos tantos en catorce jornadas de Liga) y Postiga (con uno en doce). A falta de conocer los detalles de la operación, el delantero se incorpora en este mercado de invierno en préstamo por el Wigan.

En el equipo de la segunda categoría inglesa, que el pasado verano pagó 2,5 millones de euros al Osasuna por su traspaso, había disputado trece partidos y había marcado un gol, pero el cambio de entrenador (el Wigan marcha en las últimas posiciones de la clasificación) le abrió las puertas para regresar a España. Otros equipos en busca de refuerzos para el ataque, como el Granada o el Levante, se habían interesado por el futbolista, que finalmente recala en las filas del Deportivo, donde ocupará la plaza que dejó libre la marcha de Diakité.

El goleador, nacido en Vic hace 28 años, regresa así a Galicia, pues militó en el filial del Celta durante dos temporadas y hasta llegó a debutar en Segunda División con la camiseta celeste de la mano de Eusebio en enero del 2010. Fueron cinco partidos (y uno más de Copa) en los que cuatro fueron como titular.

Allí lo preparó Milo Abelleira, actual director de la cantera del Pontevedra, quien recuerda su esfuerzo por perfeccionar la técnica de golpeo: «Hacíamos entrenamientos específicos con él. Trabajaba mucho los remates y le ayudábamos con entrenamientos específicos de centros y llegadas. Hacía el desmarque de apoyo y llegaba con esa velocidad y esa zancada que tiene al área. Era casi imparable».

Formado en la cantera del Barcelona, donde compartió generación con exdeportivistas como Verdú, Cristian, Rodri o Javito, Riera desmonta los estereotipos del jugador amamantado en La Masía. Alto (alcanza los 185 centímetros) y de complexión fuerte, su especialidad es el remate y el juego aéreo. Así lo recuerda el exfutbolista Alfredo Sánchez, ayudante de Javi Gracia la pasada temporada en el banquillo del Osasuna: «La primera vez que lo vi pensé en la inocencia. Lo ves tan grande y con sus gafitas y esa carita juvenil y parece tímido, pero ha recorrido ya muchos vestuarios y tiene experiencia y su mala leche en el campo».

En el conjunto navarro marcó trece goles en 37 jornadas, que refrendaron aquellos dieciocho que había festejado en la temporada 12-13 en el Alcorcón. Allí coincidió con el que fue portero deportivista Manu Fernández, quien recuerda al nuevo delantero del Dépor como un destino perfecto para sus saques en largo: «A la hora de sacar en largo siempre sabía que se la podía dar, porque me hacía buenos todos los balones en largo. Tiene un juego aéreo muy bueno, así que protegía el balón, o lo peinaba para la carrera de otro compañero. Era muy cómodo para jugar con él». Anteriormente había militado en el Córdoba 10-11, donde había jugado a las órdenes de Lucas Alcaraz, actual entrenador del Levante.

La llegada de Riera refuerza al Dépor en su punto débil de las últimas jornadas, la búsqueda del gol. Está previsto que el delantero se incorpore de inmediato a los entrenamientos y hasta pueda debutar el viernes (20.45 horas, C+L y GT) en la visita al Levante.