El Dépor recurrió al fútbol práctico para llevarse tres puntos sin pasar apuros
16 sep 2014 . Actualizado a las 20:24 h.Esta vez sí. El Dépor supo guardar la ropa y retener su ventaja en un duelo áspero que devolvió a Ipurúa aquella vieja imagen del fútbol por la fuerza y con balón nevado. Nada que ver, en principio, con la propuesta de Garitano y la atribuida a Víctor Fernández, que ayer renegó del toque desde la alineación inicial.
El rol de Juan Domínguez
Mediapunta, pese a Víctor
También se olvidó el míster en el once de aquella reciente rueda de prensa en la que pregonaba que a Juan Domínguez le faltan condiciones para el puesto de enganche -«No lo veo para jugar en los últimos treinta metros»-. Ayer colocó al naronés pegado a Postiga. Tan cerca que allí estaba el 10 cuando el balón quedó muerto tras la caída del portugués en el área local. En un puesto que recordaba al que varias veces le otorgó Fernando Vázquez, el canterano reincidió en sus problemas para manejarse de espaldas a portería, pero se vació en la presión adelantada sobre la imprecisa zaga armera.
Alocados arreones de Juando que poco tienen que ver con el pausado trote de Medunjanin. El bosnio ya exhibió motor diésel durante la visita del Rayo, y su pausa, tranquilizadora con la bola en los pies, le dio fuelle cuando el árbitro le regaló minutos extra.
La vuelta de Bergantiños
Recuperador en su salsa
A Medunjanin le perdonaron la expulsión en su segunda entrada al bulto. Labor de zapa ajena al 8 blanquiazul, pero muy propia de Bergantiños. El coruñés estrenó titularidad en su salsa, erigiéndose en el hombre que más balones robó durante el duelo y anulando el área de creación eibarresa, que acabó desplazándose a la izquierda.
El dúo Laure - Juanfran
Un único carril en uso
Javi Lara se convirtió en generador de juego en los locales, pese a actuar desde el costado. Allí, a mano derecha de Lux, conectó con Arruabarrena y Ángel y mezcló perfectamente con Abraham, constante quebradero de cabeza para un Laure que no dio abasto. No le faltó intensidad y alcanzó a multiplicarse en varias ocasiones, pero echó mucho de menos alguna ayuda de Juanfran, quien a cambio se prodigó en ataque. El recién llegado protagonizó varias incursiones y fue el destinatario de la mayoría de los pases de Juan Domínguez y Medunjanin. Luisinho y Cavaleiro, sin embargo, apenas comparecieron en campo rival. Lo compensaron anulando por completo a Capa y Bóveda.
El estreno de Sidnei
Centrales que mezclan bien
Y si la banda derecha del Eibar quedó inutilizada, no encontraron los armeros más vías por el centro. Allí Lopo y Sidnei disfrutaron de ese retorno al trazo grueso vivido en Ipurúa. Con Lux cazando cada balón colgado, los centrales se entendieron a la perfección para devolver envíos frontales. Especialmente fino estuvo el luso, exponente del primer cero en la meta del Dépor.
Impagable esfuerzo de Postiga
No había marcado Toché en los dos primeros partidos de Liga. Tampoco lo hizo ayer Postiga, que no solo emuló al murciano en la ausencia de gol, sino que calcó ese impagable despliegue a la hora de perseguir balones. Tanto cuando procedían de un compañero como cuando estaban en pies del rival. Inmenso trabajo el del portugués, que además acertó siempre al buscar apoyos.