Uxío brilló en su estreno oficial con el Dépor, junto a un Insua espectacular
09 sep 2013 . Actualizado a las 17:56 h.Con Kaká lesionado y Marchena fuera de forma, Fernando Vázquez tiró para medirse al Murcia de una pareja de centrales que el año pasado daba solidez al Fabril. Uxío, el novato del dúo, no desentonó. Completó un partido muy serio, al lado de un Insua que demuestra que la seguridad y el colmillo no se ganan solo con el paso del tiempo.
la inteligencia del nuevo
Anticipación para suplir la falta de centímetros
Kike García (pichichi de Segunda) llegó a Riazor con una consigna en mente: aprovechar la teórica inseguridad del nuevo miembro de la zaga blanquiazul. Con su equipo dedicado a soltar balonazos, eligió pegarse a Uxío, intentando sacar provecho de la diferencia de estatura (1,86 del ariete por 1,80 del central). Sin embargo, el debutante en el Dépor solo se dejó superar una vez en la hora y cuarto que su rival pasó sobre el césped. Fue en el minuto 55 y solventó el despiste con agarrón y tarjeta. Antes, ofreció al punta pimentonero un cursillo acelerado de anticipación.
Favorecido por la defensa adelantada de los suyos y la insistencia en los centros frontales del oponente, Uxío le ganó la partida a Kike García en los dos primeros balones largos (minutos 3 y 6) y al cuarto de hora escuchó los aplausos de la grada por una entrada efectista a ras de suelo. Tampoco se complicó sacando la pelota y descargó casi siempre la tarea en alguno de sus compañeros. A falta de ayudas, no vaciló a la hora de recurrir al patadón.
elegancia de «veterano»
Intachable atrás, sorprendente en ataque
Arizmendi se metió en el área, llegó a la línea de fondo y puso un centro atrás que un compañero alcanzó a cabecear pese a saltar entre dos rivales. El rematador no fue otro que Insua, capaz de guardar su área y sorprender en la contraria cuando ya había transcurrido una hora de encuentro.
El central es una de las mejores noticias del Dépor 13/14 (con diferencia, el jugador más regular de este arranque de temporada). Ayer fue una de sus carreras desde la cueva la que propició la primera ocasión seria ante la meta de Casto. Atravesó la medular y le dejó a Culio la misión del pase medido a Borja, que no logró salvar al portero. Protegiendo el marco propio tuvo que disimular los excesos de Luisinho, ayer mucho más flojo que en Sabadell. El lateral olvidó con demasiada frecuencia retornar a tiempo de sus alegrías ofensivas.
El único tanto del choque salió de una falta originada en un duelo aéreo perdido por el portugués. Insua tuvo que acudir a evitar el centro posterior y lo hizo con una clara infracción.
beneficiosa competencia
La sombra de Wilk y el marcaje a Juando exigen a Bergantiños
Julio Velázquez dispuso un pegajoso marcaje sobre Juando y Culio que obligó a Bergantiños a asumir un papel que siempre le ha costado: el de generar juego. Sin embargo, la competencia de Wilk parece haber azuzado al de la Sagrada, que ayer se marcó un partidazo iniciado en el minuto 7 con un perfecto cambio de juego para la subida de Laure. Además, se jugó el físico para robar balones en zonas de riesgo para el rival (así facilitó el formidable chut de Borja en el 24) y se multiplicó para cubrir las espaldas a los laterales.
maldita estrategia
Derrotas a balón parado
Si los tres primeros puntos del Dépor nacieron en una esquina del estadio de Gran Canaria, de Riazor han volado seis en jugadas de estrategia. Ayer, el Dépor derrochó diez lanzamientos de córner y tres faltas laterales.