El Deportivo hace los deberes y gana al Espanyol

Miguel Piñeiro Rodríguez
MIGUEL PIÑEIRO LA VOZ / REDACCIÓN

TORRE DE MARATHÓN

M.MARRAS

Los goles de Bruno Gama y Nelson Oliveira desnivelan un partido con muchos nervios

20 may 2013 . Actualizado a las 11:51 h.

Trece años después el Deportivo repite un 2-0 contra el Espanyol con significado bien distinto. Fue un partido extraño pero las valoraciones estéticas o futbolísticas se quedan en un plano muy secundario para el Dépor, que sacó adelante su cita y cumplió con su parte en la jornada de Liga antes de que el Athletic venciese en Zaragoza y le sacase del descenso. Ganó el equipo coruñés con goles de Bruno Gama y Nélson Oliveira, que aguó la fiesta de Riazor con un comportamiento impropio de un alevín. El Dépor sufrió y concedió ocasiones claras a un Espanyol que mezcló minutos de sesteo con otros de punzante ataque. Pero el equipo coruñés defendió el gol de Gama en el arranque del segundo tiempo, recurrió a los tres centrales para taponar las vías de agua y sentenció a la contra con la brillante definición de Oliveira, que sin embargo clausuró su etapa deportivista con toda seguridad al enfrentarse a la afición.

El Espanyol irrumpió en Riazor con el mismo estruendo que el color fosforito de su segunda equipación. Dos claras ocasiones en apenas dos minutos silenció un Riazor preparado para la batalla, de nuevo a rebosar. Sergio García desbordó por la izquierda y Stuani no remató por poco. A los segundos, el uruguayo (que pasó reconocimiento médico en A Coruña el pasado verano) cabeceó al larguero tras un centro desde la derecha. Suspiró de manera profunda el Dépor porque se pudo ver 0-2 abajo en un abrir y cerrar de ojos. El partido fue una orgía de llegadas en ambas áreas hasta que el Espanyol dio un paso atrás y bajó su intensidad. Fueron, mientras, unos 25 minutos locos.

El Dépor encontró aire por la movilidad de Riki y la presencia de Pizzi en la banda derecha. Vigiladísimo Valerón por el duro Baena, al equipo de Fernando Vázquez le costó mezclar toda vez que el correcalles se frenaba. Riki estuvo cerca de marcar a los nueve minutos pero Javi López salvó casi bajo palos, con Cristian Álvarez batido. El meta argentino brilló poco después en el mano a mano con Pizzi tras una preciosa pared del luso en la frontal del área. Había más llegadas que fútbol ante un Espanyol que aprovechaba la velocidad de Sergio García, Wakaso y Stuani. El juego se peró cuando un energúmeno lanzó una botella de vidrio hacia el árbitro y el Espanyol se desconectó.

El Dépor apretó a través del balón parado (lanzados en su mayoría fatal) y el equipo coruñés pasó a dominar posicionalmente a un Espanyol que se fío a las contras, rebajando marchas en su juego. Verdú amenazó con un tiro de media distancia pero sin mayor historia. Al Dépor, sin embargo, el repliegue del rival le dio tranquilidad pero le apagó algo las luces en ataque. Quizás por eso encontró el gol en la reanudación poco después de la jugada defensiva del año: Wakaso condujo la contra del Espanyol, dejó a Sergio García solo ante Aranzubía, el portero rozó el disparo con muchos reflejos y Silvio sacó bajo palos y sobre la línea en postura inverosímil.

Instantes después, Bruno Gama, ante la pasividad de Stuani, combaba un violentísimo disparo de derechas desde el pico izquierdo del área, inalcanzable para Cristian Álvarez. El golazo liberó de cierta tensión al Dépor pero obligó al Espanyol a dar más la cara. Abel Aguilar salvó cuando Sergio García se relamía ante Aranzubía. Y con ese sustito el Dépor dio un paso atrás. El partido pudo cambiar de manera drástica al cuarto de hora: Riki perdonó un mano a mano clarísimo después de un error de bulto de Baena, y segundos después Abel Aguilar escapó de la expulsión por doble amarilla.

Movieron piezas los banquillos y Cristian Gómez y Álex Bergantiños reforzaron las líneas medias de ambos equipos. A Fernando Vázquez no le bastó y poco después retiró además a Riki y a Valerón por Nélson Oliveria y Kaká. Se pertrechó el Dépor en los tres centrales después de que sólo Riki, en un par de galopadas, crease peligro con un tiro que rozó la escuadra. El Espanyol se volcó con todo lo que tenía en el campo y en el banquillo. Los laterales del Dépor mostraron tembleque en una gran jugada de Javi López y Aranzubía tuvo que hacer la parada de la tarde ante Verdú.

Hubo muchos nervios y tensión en el ambiente en los minutos finales, pero el Dépor se mantuvo todo lo firme que supo y al Espanyol no le sobraron ideas en los metros finales. Creó una tormenta, pero antes Nélson Oliveira ahorró sufrimientos con una gran definición donde minutos antes a Riki le pesaron las piernas. Riazor celebró un triunfo que valdría más en función del resto de la jornada. Pero los deberes quedaron hechos. Luego los completó el Athletic en Zaragoza.

2 Deportivo: Aranzubia; Manuel Pablo, Aythami, Zé Castro, Sílvio; Abel Aguilar (Álex Bergantiños, min.64), Juan Domínguez; Bruno Gama, Valerón (Kaká, min.75'), Pizzi; y Riki (Nelson Oliveira, 79').

0 Espanyol: Cristian Álvarez; Javi López, Colotto, Raúl Rodríguez, Víctor Álvarez; Baena (Simao, min.71), Tejera (Cristian Gómez, min.58); Stuani, Verdú (Petrov, min.85'), Wakaso; y Sergio García.

Goles: 1-0, min.49: Bruno Gama. 2-0, min.91: Nelson Oliveira.

Árbitro: César Muñiz Fernández, del colegio asturiano. Mostró tarjeta amarilla a Manuel Pablo (min.30), Abel Aguilar (min.34) y Valerón (min.65), por el Deportivo, y a Tejera (min.12), Baena (min.41), Cristian Álvarez (min.44), Javi López (min.55) y Colotto (min.86), por el Espanyol.