La masa de aire polar se aproxima y mañana viernes se producirán en la mitad norte las primeras precipitaciones
25 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Ayer las temperaturas volvieron a ser muy elevadas para la época del año. El termómetro en el sur de la comunidad alcanzó los 27,8 grados. Y todo ello con un cielo sin una sola nube, ni siquiera en A Mariña. Pero este veranillo tiene las horas contadas. El sábado llega a Galicia la masa de aire polar que llevan anunciando los modelos meteorológicos varios días. Habrá un notable descenso de las temperaturas y además se producirá la primera gran nevada de la temporada. La masa de aire procede del Ártico y, por tanto, llega a la comunidad fría y húmeda. Mañana se esperan las primeras precipitaciones, aunque se van a concentrar únicamente en la mitad norte. El sábado la inestabilidad ya será generalizada pero los chaparrones seguirán cayendo de forma más frecuente e intensa en las provincias de A Coruña y Lugo. Los chubascos se presentarán en algunos momentos acompañados de granizo y tormentas. Por la tarde está previsto que llegue la parte más gélida de la masa polar, que provocará que la lluvia a partir de los 1.200 metros de altura se precipite en forma de nieve. De noche la cota descenderá un poco más, hasta situarse en 800 metros. Los primeros copos del otoño están asegurados en las montañas de Lugo y Ourense. «No se puede saber con seguridad si se van a activar avisos por nieve para el fin de semana, pero parece probable que así sea», reconoce Francisco Infante, delegado de la Aemet en Galicia.
El sábado no solo irrumpirá la nieve, sino que el termómetro experimentará un descenso más que notable, sobre todo respecto a los valores tan agradables se que están registrando esta semana. En algunos casos las máximas caerán en picado hasta trece grados. En Vigo, por ejemplo, los 28 grados se transformarán en 15 como mucho. En otros puntos del interior el mercurio ni siquiera llegará a los 11, como ocurrirá en Lugo. Las mínimas marcarán además cifras negativas en el interior. Allí donde no se acumule la nieve se formarán heladas. El viento del norte también favorecerá la sensación térmica sea de frío intenso, ya que soplará con intervalos fuertes en toda la comunidad.
Tal y como estaba previsto, el anticiclón de las Azores y las borrascas se pondrán de acuerdo para crear un pasillo que conecta el Ártico con Galicia. Este corredor se mantendrá abierto durante todo el fin de semana. El domingo incluso podrían descender todavía más las temperaturas máximas y, sobre todo, las mínimas. No será, de todas formas, una ola de frío, ya que para ser calificada como tal un período de bajas temperaturas debe mantenerse durante tres jornadas consecutivas con valores por debajo de la media, tanto en las máximas como en las mínimas, y parece que este no será el caso. «La semana que viene es probable que también sea más fría y húmeda de lo normal, lo que supone un cambio con respecto al tiempo que hemos tenido durante los últimos días y semanas», admite Infante.