¿De dónde se ha sacado el estilo Taylor Swift?

La Voz REDACCIÓN

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ERIC THAYER

La cantante country reconvertida en princesa del pop es ya un icono en las alfombras rojas y la niña mimada de la moda en el otro lado del charco

15 sep 2014 . Actualizado a las 14:13 h.

Con solo 24 años, Taylor Swift es uno de los ojos derechos de la industria de la música en Estados Unidos, y así lo avala ser la cantante de menos de 30 años que más dinero ingresa al año según la revista Forbes. Sin embargo, muchos de los que la vean ahora siendo la estrella de la alfombra roja de alguna entrega de premios, quizás no reconozcan en ella a aquella chica que con solo 18 años saltó a la fama componiendo canciones country embutida en sus botas de cowgirl, flojos vestidos estampados y su melena rubia rizos como corona. Hoy por hoy, poco queda de aquella adolescente pegada a una guitarra y que respiraba un halo naif recurrente. Su estilo ha cambiado, tanto en el exterior como en su música aunque sigue sin basar sus numerosos éxitos en la provocación. Su último disco, 1989, que saldrá dentro de un par de semanas a la venta, da un giro de 180 grados a sus trabajos anteriores. Quizás por esta razón, la revista Rolling Stone le dedica su última portada con un articulo titulado «La reinvención de Taylor Swift».

Una reinvención que no solo llega de mano de sus canciones, que siguen como antaño estando protagonizadas por sus amoríos y desengaños. El cambio de esta cantante se lleva gestando un par de meses. Quien la ha seguido de cerca habrá visto como primero abandono su cabellera rizada. Quizás fue el primer aviso de que algo iba a cambiar, porque a partir de entonces la joven ha ido puliendo su estilo de forma paulatina y metiéndose uno tras otro a los numerosos expertos en moda. Taylor Swift, en realidad, nunca se caracterizó por sus extravagantes apariciones en las alfombras rojas. Al contrario, no llamaba la atención por lo correcta que iba siempre. Sus vestidos de silueta bar -de corpiño ajustado y falda de vuelo- eran su seña de identidad. El resto le daba un poco igual, tanto, que, a veces, los combinada con las botas de cowboy que desentonaban su cuidado look.

Sin embargo, de repente, todo cambió. Muchos apuntan a su mudanza a Nueva York y que se empezara a codear con algunas modelos de Victoria Secret como inicio de la transformación, aunque otros tantos señalan que ya con su anterior disco -Red- la cantante ya empezó a perfilar su nuevo estilo. Ahora, los paparazzi y el resto de la humanidad vive anonada como Taylor Swift sale del gimnasio impecable dejando enamorado a medio mundo, mientras la otra mitad la odia por su inquietante perfección. Aunque los vestidos siguen siendo su prenda favorita, se han acortado un poco y los combina sin miedo: con zapatos de tacón, de vez en cuando con coquetos sombreros y sus labios rojos, que son ya su nueva marca de la casa.

Tras meses de asistir impertérritos a la transformación, la crítica la ha elevado a los altares de a moda. Mientras, Taylor Swift ha cambiado los vestidos de silueta bar por los vestidos lady o de tubo, monos o faldas que cumplan el único requisito de que le dejen enseñar sus largas piernas. El único requisito para ella parece que ha sido mantener ese estilo naif y no provocador que también le ha ido hasta ahora, incorporando además cierto aire retro que parece que ha sido la clave. Eso sí, lo que no ha cambiado es su poco amor hacía los pantalones largos, que solo luce en invierno cuando el invierno aprieta. Así, poco a poco, sus constante aciertos la han colocado en las listas de mejor vestidas ya que es misión imposible cazarla con un estilismo poco acertado en el día a día y menos en la alfombra roja. Sin embargo, muchos creen que, quizás en su afán de perfeccionar su imagen de nueva princesa del pop, estos aciertos pueden llegar a su fin. ¿La razón? El mono azul que lució en los últimos premios MTV.

Un error controlado por el tipo de gala desenfada que se trataba o un desliz sin más, no queda duda que Taylor Swift marca tendencia, y no solo musical. La cantante ya es un icono de estilo, nadie lo pone en duda. Si sus fans ya seguían su estilo, cada vez más mujeres siguen sus dictámenes para lucir igual de elegantes. Ahora que las nuevas colecciones -como la de El Corte Inglés- ya abarrotan las tiendas, no hay mejor momentos que plantarse inspirándose en la estadounidense para incorporar nuevas prendas a nuestro armario. ¿Cómo? Sencillo. Un vestido corto de tipo túnica y con estampado floral, acompañado por una chaqueta perfecto negro y un bolso de piel tipo pouch podría ser una de las opciones «copiando» a la cantante para una salida por Nueva York. Otra opción, de las arriesgadas que toma ella últimamente, podría ser una falda corta recta en color gris, una bomber en satén verde y una bandolera de color naranja. Incorporando un poco de pintalabios labios como haría Taylor Swift, y listas para afrontar el otoño.