Los aspirantes, divididos dos equipos, cocinan un menú típico gallego para 120 personas que resultaron damnificadas por los fuegos de octubre
30 abr 2018 . Actualizado a las 02:23 h.MasterChef viajó anoche a Galicia en su prueba de exteriores para homenajear a los afectados de los incendios forestales del pasado otoño. Desde un marco incomparable, el parador de Baiona, y con el océano Atlántico al fondo, los aspirantes del talent-show culinario han elaborado un menú típico gallego que han servido a 120 personas que resultaron afectadas por los fuegos, que quemaron cerca de 80.000 hectáreas. Cada equipo ha tenido que elaborar dos platos distintos.
El chef gallego Rafael Centeno, autodidacta y con una estrella Michelin, ha enseñado a los aspirantes (Daniel, Eva, Fabio, Jon, Jorge, Ketty, Loli, Marina, Marta, Oxana, Ramón, Sofía, Toni y Víctor) que con trabajo duro, determinación y tenacidad se puede llegar muy lejos.
Antes de viajar a Baiona los aspirantes de MasterChef han tenido una curiosa primera prueba al tener que cocinar un plato libre con los alimentos que dejaron en la nevera de su casa antes de entrar en el concurso. Así han podido aprender cuáles son los ingredientes que nunca le pueden faltar a un gran chef. Ese no ha sido su único obstáculo porque en mitad del reto se han quedado sin electricidad. La sorpresa final ha llegado de la mano de varios de los concursantes de la anterior edición (Nathan, Edurne, Odkhuu, José María y Paloma) que han sido los encargados de probar los platos que habían elaborado.
Tras la prueba de exteriores en tierras gallegas han regresado al plató para enfrentarse a otro reto, muy dulce. En las cocinas estaba el catalán David Pallàs que les ha retado a reproducir tres tipos de trufas. Y para preparar trufas se han estado preparando con anterioridad los concursantes de MasterChef.
La semana pasada Fernando se convirtió en el primer expulsado de esta edición de MasterChef. Fue el primero en decir adiós a las cocinas del talent-show de La 1 y ayer lo hizo Loli.
