La contradicción que delata a Silvia Charro y Simón Pérez en relación a su vídeo viral

C. Barbería REDACCIÓN

TELEVISIÓN

El exdirector de la escuela de finanzas EIAF asegura que grabaron el vídeo a las 8 de la mañana, mientras que ella dice que venía de una comida de empresa

15 dic 2017 . Actualizado a las 20:32 h.

Silvia Charro y Simón Pérez se convirtieron este jueves en los protagonistas indiscutibles del día. Un vídeo que casi ha alcanzado los dos millones de reproducciones en Youtube y en el que hablaban a gran velocidad sobre el tipo de hipoteca que escoger con gestos propios de quienes están bajo los efectos de algún tipo de sustancia, viajó de móvil en móvil por los grupos de Whatsapp de medio país, fue trending topic y generó multitud de reacciones y memes en las redes sociales.

El vídeo se convirtió en viral. Y tuvo consecuencias para sus carreras: ella fue despedida por la inmobiliaria para la que trabajaba.

Este viernes Silvia Charro y Simón Pérez han acudido al plató de Espejo Público para dar la cara y explicarse. Aseguran que, aunque no se encontraban bajo los efectos de ninguna sustancia, querían parecer «tiburones financieros como los de la película El lobo de Wall Street». «Fingimos una conducta agresiva, impulsiva, inmoral, materialista. Estábamos sobreactuando», aseguró Simón Pérez durante el transcurso del programa.

La actitud que ambos mantuvieron en el espacio que presenta Susanna Griso resultaba muy similar al del vídeo que los lanzó a la fama y achacan ese comportamiento a los «nervios» propios de quien se pone delante de una cámara o incluso al TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad) que asegura tener diagnosticado Silvia Charro.

Los expertos en hipotecas más mediáticos de España aseguran que decidieron hacer el vídeo sobre las hipotecas de tipo fijo de ese modo tan particular como una estrategia de márketing para una nueva empresa que van a lanzar, y que con su forma de actuar pretendían que les llamasen «burbujistas», pero «no colocados». «Vimos que el vídeo era muy aburrido y quisimos hacerlo más divertido», comentó Silvia Charro.

A pesar de que se mantuvieron fieles al discurso de que todo se debía a una campaña publicitaria mezclada con los nervios de una grabación, en su explicación Silvia Charro y Simón Pérez cayeron en una más que evidente contradicción. El hasta ayer director de la escuela de finanzas EIAF aseguró que el vídeo estaba grabado a las 8 de la mañana y que «no había tomado ni un café», mientras que la ya execonomista de Engel & Völkers explicó que venía de «la comida de Navidad de la empresa», pero que «no había tomado nada».