La denuncia de Rapp llevó a Spacey a admitir su homosexualidad y asegurar que no recordaba el episodio del que le acusaba, aunque dijo que si realmente tuvo lugar le debía «la más sincera disculpa».
«Honestamente, no recuerdo el encuentro, hubiera sido hace más de 30 años. Pero si me comporté como él describe, le debo la más sincera disculpa por lo que habría sido un comportamiento ebrio profundamente inapropiado», adujo Spacey en un comunicado publicado en su perfil de Twitter.