Víctor Fábregas, que dio vida a Tucho en el exitoso dúo cómico, fue el invitado del programa cien de Roberto Vilar
20 oct 2017 . Actualizado a las 18:10 h.Land Rober Tunai Show ya es centenario. El programa de la TVG celebró en la noche del jueves su emisión número cien y para una fecha tan especial decidió reunir por primera vez en un plató desde el 2008 a Roberto Vilar y Víctor Fábregas, los dos integrantes del exitoso dúo cómico de Os Tonechos.
La audiencia respaldó uno de los reencuentros más esperados en la televisión autonómica con 204.000 espectadores y un 23,2 % de cuota de pantalla, con la que Land Rober Tunai Show se convirtió en el programa más visto en Galicia en su franja horaria. Y todo a pesar de que Roberto Vilar y Víctor Fábregas no volvieron a ponerse en la piel de Tucho y Tonecho para protagonizar un último sketch de Os Tonechos, tal y como esperaba el público y como se venía especulando desde que se supo que Víctor Fábregas sería el invitado del programa número cien.
Pero los seguidores de Os Tonechos tendrán una última oportunidad para disfrutar del humor característico del dúo cómico más exitoso de Galicia, ya que tal y como anunciaron al final del programa, Roberto Vilar y Víctor Fábregas volverán a ser Os Tonechos y a dar vida una vez más a Tonecho y Tucho en una última actuación el próximo 3 de febrero en Lalín.
Un invitado tan especial como el de este jueves se merecía un recibimiento a la altura, y para ello, el presentador de Land Rober Tunai Show salió a la puerta de los estudios de la TVG para recibirlo. Charlaron distendidamente por los pasillos de las instalaciones hasta que los cómicos que encumbraron a Os Tonechos pisaron un plató que los recibió con una de las ovaciones más sentidas que se recuerdan.
Roberto Vilar y Víctor Fábregas hicieron una de las cosas que mejor se les da: hacer reír al público con una conversación improvisada y llena de guiños a su pasado como dúo cómico. Se sentaron en lo que emulaba ser una residencia en la que Tucho y Tonecho residían desde que en junio del 2008 realizaran su última actuación y comenzaron a hablar de sus inicios, de Luar, de las leyendas urbanas que los rodearon e incluso de su separación. Pero sin duda, el momento más emotivo fue en el que ambos recordaron a Dorotea Bárcena, la actriz que interpretó junto a ellos el papel de Amadora y que falleció en noviembre del pasado año.
El programa continuó con la presencia de Víctor Fábregas. Touriñán se sumó a la improvisación en la residencia, después los tres juntos hicieron de gorrillas y al final Roberto Vilar y el invitado se sentaron en un cara a cara en el que tenían que contar anécdotas y adivinar si eran ciertas o no.
El gran momento de «Land Rober»
Land Rober vive uno de sus mejores momentos. En esta segunda etapa en la TVG, Land Rober ha conseguido hacerse un hueco en la parrilla televisiva de la TVG y plantar cara y con mucho éxito al resto de los programas a los que se enfrentaba. Land Rober mantiene un público fiel y sobretodo joven, que espera meses para acudir como público y que cada semana se sienta frente al televisor para ver las nuevas ocurrencias de Roberto Vilar, Xosé Antonio Touriñán y Eva Iglesias.
Uno de los éxitos de Land Rober ha sido saber llegar tirando de humor, retranca y un lenguaje de la calle (y con toques rurales) a un público cuya oferta televisiva y a la carta no para de crecer. Sus imitaciones de los gorrillas, los cameos de David Perdomo, su versión de Primeiras Citas (First Dates), Media Castaña, son algunos de estos ejemplos para los que además se suelen prestar de forma solícita los invitados. Otra de las grandes bazas de Land Rober es la alta interacción con el público. En cada programa seleccionan a varios participantes para que protagonicen las pruebas a las que someten a los invitados y también piden la colaboración de los telespectadores para que envíen fotos y los repasan en directo antes de que finalice el programa.
Land Rober tocó el éxito en el último programa de la pasada temporada, que coronó con una entrevista a Julio Iglesias, que logró un 33,8 % de cuota de pantalla en Galicia, marchando así su máximo histórico.
Os Tonechos, seis años de éxitos
Os Tonechos nació en el año 2002 y estuvo en activo hasta el 2009. Durante más de seis años, Roberto Vilar y Víctor Fábregas se convirtieron en el dúo más famosos de la televisión gallega. El planteamiento era simple, Roberto Vilar encarnaba al padre, Tonecho, que aparecía en escena en pijama, una gorra y un cigarro en la mano. Por su parte Víctor Fábregas daba vida al hijo, Tucho, que aparecía generalmente con un casco en la cabeza.
El dúo cómico que nació en Luar en el 2002 y durante años interpretaron Roberto Vilar y Víctor Fábregas, terminó sumando el papel de la suegra y abuela respectivamente que interpretó la inolvidable Dorotea Bárcena y el de la mujer y madre, como Maribel (Mariana Carballal).
El dúo cómico fue tan famoso que terminó por hacer populares frases como «Papá pasa de todo tío», «está posto con malicia» o «eu nacín no Congho belga», entre otras.
Tonecho y Tucho terminaron por «invadir» incluso otras series, como Pratos Combinados, en la que dieron vida a unos primos de Miro Pereira, dando pie a surrealistas escenas con el dueño de uno de los bares más famosos de la televisión gallega.
En el 2005 la TVG les dio un programa propio O show dos Tonechos, donde definitivamente dieron rienda suelta a su imaginación y planteaban todo tipo de situaciones a cada cual más cómica.
Y durante varios veranos, Os Tonechos giraron por fiestas y verbenas para representar su humor más irreverente, logrando un gran éxito. A principios del año 2009 Os Tonechos anunciaban que se tomaban un descanso tras seis años en la cresta de la ola. En aquel momento anunciaban que se trataba simplemente de un «hasta luego», pero finalmente el adiós fue definitivo. «Foron uns anos moi esixentes e moi intensos. Tanto os dous anos que estivemos en Luar como os catro que saímos a antena con O show dos Tonechos», explicaba en aquel momento Víctor Fábregas a La Voz. «Chega un punto en que necesitas osixenarte, e este parón vainos vir moi ben os dous», añadía. Como en todas las separaciones, Víctor Fábregas se vio obligado a acallar los rumores que indicaban que la relación de amistad que unía a los dos componentes de Os Tonechos se había roto. «O que non podemos é saír na pantalla e transmitir fastío», argumentaba, para explicar que simplemetne estaban un tanto cansados de interpretar al dúo cómico.
Los inicios tanto de Roberto Vilar como de Víctor Fábregas fueron casi casuales. Los dos trabajaban en otras cosas antes de terminar colándose cada noche en los hogares de miles de gallegos para contar las aventuras de Os Tonechos. Roberto Vilar, natural de Xove, comenzó como cámara y ayudante de realización en la TVG, pero su vis cómica le terminó colocando ante las cámaras. Por su parte Víctor Fábregas, de Muros, trabajó como vigilante de seguridad en una conservera de Carnota. El actor confesaba que durante un tiempo compaginó este trabajo con Os Tonechos. «Eu traballaba na conserveira de Carnota, e cando me chamaron para traballar no Con perdón dixen: 'Papá, eu non sei se deixalo'. E o meu pai, como bo galego, díxome 'aguanta aí'. E aguantei. Xa cos Tonechos en Luar estiven aínda tres meses na fábrica, o cal era unha comedia, porque eu estaba de vixiante nunha garita... Así que imaxínate cando a xente entraba e saía: 'Temos a Tucho dos Tonechos de vixiante da fábrica'», recordaba bromeando.
También hablaba en esa ocasión Víctor Fábregas de cómo se les ocurrió el peculiar atuendo de Tonecho y Tucho. «Tivemos moita sorte, porque a pinta de saír el co pixama e eu co casco era en principio só para o primeiro día, pero vimos que funcionaba e que había unha resposta por parte da xente, polo que foi moi fácil. Iso si, non temos a receita do éxito, o mesmo que funcionou puido non funcionar», aseguraba.