Nikolaj Coster-Waldau: «Lo importante es no defraudar y acabar a lo grande, como 'Los Soprano'»

María Estévez LOS ÁNGELES / COLPISA

TELEVISIÓN

El actor asegura que para los seguidores de «Juego de tronos» la disfunción de los Lannister es su mayor atractivo

25 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Nikolaj Coster-Waldau, o Jaime Lannister, alias Matarreyes, para los seguidores de Juego de tronos, es el actor revelación de Dinamarca. Este hípster escandinavo triunfa en la televisión y también en la gran pantalla con títulos como Dioses de Egipto, que se estrenó esta semana, o Second Chance, que llegará pronto. Un gran momento profesional que le debe a Juego de tronos, que en la madrugada de mañana al lunes emite el último capítulo de su sexta temporada. Un episodio más largo de lo habitual que promete ser espectacular. 

-¿Le molesta que se le vincule tanto a «Juego de Tronos»?

-No, para nada, lo entiendo. Yo no estaría aquí sin el personaje de Jaime Lannister. Gracias a la serie estoy disfrutando de unos momentos increíbles y no puedo sino sentirme agradecido por toda la atención que recibo.

-En «Juego de Tronos», el tono de la historia es cada vez más oscuro, parece mucho más comprometido moralmente...

-Cuando lo primero que hace tu personaje es mantener una relación sexual con su hermana, poco más esperas moralmente de ese papel. Hay una gran distancia entre cómo queremos ser y cómo somos en realidad.

-¿Qué motiva emocionalmente a Jaime Lannister?

-Sin duda, el amor. Él expresa sus sentimientos como un sociópata, le gusta matar. Desde el primer momento entendí que Jaime era un gran personaje, ambiguo, impredecible y muy bien escrito.

-Los seguidores de la serie son fieles...

-¿Los tronies’? Son sensacionales, pero hay que tener cuidado porque saben más que los actores protagonistas (risas). 

-¿Cómo describiría al clan de los Lannister?

-Son bastante disfuncionales como familia. Son un clan para quienes el poder es todo. El hecho de que Tyrion, Cersei y Jaime hayan crecido sin madre tiene un enorme efecto en sus vidas. Desde luego, es posible culpar a su padre de ser como son. Pero para los seguidores de la series su disfunción es su mayor atractivo, y creo que, en realidad, la mayoría de las familias tienen su buena dosis de conflictos.

-El final de la serie está cada vez más cerca.

-Sí, por eso las historias de los personajes principales se van trenzando. Estamos ante un momento muy importante en la narrativa de la serie y no queda mucho para el desenlace. Lo más importante es no defraudar a los millones de seguidores de la serie y terminar a lo grande, como Los Soprano.

-Sin duda, este es un gran año para usted con la sexta temporada de «Juego de tronos» y el estreno de «Dioses de Egipto»...

-Estoy muy agradecido a la serie porque ha cambiado mi vida. Pero me considero una persona humilde y no voy a volverme un presumido por un éxito que no me corresponde a mí solo.

-Usted es un actor danés que ha desarrollado su carrera profesional en su país. ¿En algún momento esperaba triunfar en Hollywood?

-No, nunca. Ese es el sueño de cualquier actor, pero, al mismo tiempo, en esta profesión uno no puede esperar nada. A mí lo que me gusta es trabajar, tener un cheque a fin de mes. Sé lo que es estar desempleado, en el paro y desesperado. Sé lo que es pelear por un papel y sufrir a través de los años. Ahora estoy disfrutando mi momento.

-¿Cuida su aspecto físico tanto para mantenerse en la lista de los más atractivos del planeta?

-No. No me preocupo tanto de mi imagen. Soy un padre de familia con dos hijas adolescentes. La vanidad no tiene lugar en mi vida.