«Making a murderer»: las claves de la serie de Netflix de la que todo el mundo va a hablar

La Voz REDACCIÓN

PLATA O PLOMO

El documental en diez capítulos ha hecho tambalear el sistema judicial de Estados Unidos

15 ene 2016 . Actualizado a las 17:36 h.

Fabricando un asesino, ese es el título de la última sensación audiovisual de la plataforma Netflix. Una serie de la que todo el mundo habla en Estados Unidos pero que tiene una diferencia fundamental de las producciones que están en boca de todos habitualmente -como Jessica Jones, Unbreakable Kimmy Schmidt, Juego de Tronos o The Walking Dead. Porque Making a murderer no es ficción. Todo lo que se cuenta en ella es real.

La serie documental de diez capítulos ha tenido un impacto enorme en Estados Unidos. Tanto, que ha llegado a poner en cuestión el sistema judicial del autoproclamado país de la libertad.

Las conversaciones de buena parte de los ciudadanos estadounidenses se han centrado estos días en la abrumadora impresión de haber visto una producción que ha indignado a todos sus espectadores. No se habla de la muerte de un personaje favorito ni del enésimo giro argumental salido de la cabeza de algún guionista, sino las injusticias de una historia tan real como la vida misma.

¿Cuál es la historia? (ATENCIÓN: A PARTIR DE AQUÍ HAY SPOILERS)

La historia de Making a Murderer cuenta la mayor parte de la vidad de Steven Avery, un ciudadano de Wisconsin que pasó 18 años en prisión hasta que, en una revisión del juicio, fue exonerado por la justicia porque el ADN del agresor no coincidía con el del preso. Y, en ese tiempo, el perpetrador del crimen había cometido otros dos asaltos sexuales más.

Justo en el momento en el que exige al condado una indemnización de 36 millones de dólares, a Avery se le acusa por un caso nuevo: el brutal asesinato de una joven que le enfrentará a un juicio que puede condenarle a cadena perpetua.

Avery vuelve a estar en el banquillo. Y todos los responsables de mandarlo a la cárcel durante 18 años, por el contrario, parecen estar libres de toda culpa.

¿Cómo está tratado en la serie documental?

Las creadoras de este impactante trabajo documental, Laura Ricciardi y Moira Demos, han asegurado que intentaron exponer con veracidad las dos partes de la historia en Making a Murderer.

Las autoras han invertido una década de trabajo, en las que han grabado 700 horas de metraje y, tras intensas horas de edición, la serie, que inicialmente iba a ser de solo tres episodios, ha terminado siendo de diez capítulos de una hora de duración cada uno.

Las autoridades de Wisconsin, por el contrario, han criticado la falta de objetividad de la serie documental y algunas de las personas señaladas en la producción de plantar pruebas o dirigir el juicio contra el acusado han afirmado que nunca se les permitió dar su propia versión de los hechos.

¿Cuáles han sido las consecuencias?

La reacción de los espectadores ante las irregularidades del sistema judicial en el condado de Wisconsin tratadas en Making a Murderer no se hizo esperar y muchos se mostraron indignados ante unas acciones que les hacían perder la fe en la humanidad y la Justicia. Hasta el punto de que uno de los muchos seguidores cabreados con el documental no tardaron en hacer una petición a través de Change.org dirigida a Barack Obama y al gobernador de Wisconsin para que tomaran cartas en el asunto. En pocos días, la iniciativa lograba sumar más de 250.000 adhesiones.

Junto a esa causa, se ha creado la página web FreeStevenAvery en la que se explica a quienes quieran luchar contra estas injusticias cómo pueden colaborar, bien a través de cartas al gobernador Scott Walker o a Barack Obama, bien uniéndose a las páginas en Facebook o Twitter de la familia del acusado o incluso ayudando con detectives privados.

Los medios de comunicación también se han heco eco del documental y, en los últimos días, se han puesto en contacto con los implicados, han elaborado todo tipo de teorías y han llamado a la revisión del caso.

Hasta Anonymous ha entrado en el juego, diciendo que tiene pruebas contra los agentes que supuestamente plantaron las pruebas con las que se culpó a Avery.

¿Es una buena serie documental?

Los críticos del audiovisual han reaccionado muy favorablemente a la Making a Murderer. Muchos la ven como la mejor producción en la corta historia de Netflix y han valorado positivamente su exhaustividad.

El público, por otra parte, también ha visto con muy buenos ojos la serie. Y no solamente por su repercusión social. Muchos espectadores han confesado su naturaleza adictiva por sus muchos giros insospechados en los acontecimientos, que son todavía más sorprendentes por tratarse de hechos reales.

¿Cómo puedo verla?

La serie documental Making a Murderer está, desde el pasado 18 de diciembre, incluida en el catálogo de Netflix a nivel mundial. Para poder disfrutar de la serie completa, hay que ser suscriptor de la plataforma, que es gratis el primer mes y cuenta con planes mensuales desde 7,99 euros el más básico hasta los 11,99 de las cuentas premium.