Alerta de la inacción del Gobierno un año después del cierre de nueve canales
08 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Hace un año que la oferta televisiva en España es un 37,5 % menor, desde que el Tribunal Supremo obligó a cerrar nueve canales de TDT que habían sido concedidos de formar irregular: La Sexta 3, Xplora, Nitro, La Siete, Nueve, dos de Veo TV y dos de Net TV. Aún así, la televisión digital terrestre sigue siendo la opción mayoritaria en el consumo con un 80,4 % frente a las opciones de pago de cable y satélite. La Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (Uteca) denunció ayer, con motivo del primer aniversario del cierre, que existe un «hostigamiento a la televisión en abierto» y que el reciente anuncio de la convocatoria de adjudicación de seis nuevos canales no resuelve el problema de que la continuidad de otros ocho ya existentes esté pendiente de una resolución del Tribunal Supremo.
Uteca critica que, mientras se alerta del riesgo de que la televisión en abierto esté principalmente en manos de dos grandes operadores (Mediaset y Atresmedia), paradójicamente «el regulador que debe velar por la pluralidad y competencia en los mercados ha dado luz verde a la operación de compra de la plataforma de pago de televisión por satélite Canal+ por parte de Telefónica; una situación que permitirá que un solo operador se convierta en el gran dominador del mercado de la televisión de pago». Con respecto a la oferta en abierto, recuerda Uteca que «cualquier espectador medio» en España dispone actualmente de entre 20 y 30 opciones.
Las televisiones comerciales instan al Gobierno a «modificar su manera de actuar y corregir los desatinos cometidos» y piden «seguridad jurídica» para los actuales quince canales de TDT. «El actual panorama audiovisual no puede estar sujeto a arbitrios judiciales, interpretaciones, recursos e intereses particulares y debería ser una prioridad para el Gobierno», señalan.
De no ser así, y si se produce la anulación judicial de otros ocho canales, «la inacción» por parte de Industria puede dar como resultado que en apenas un año los telespectadores pierdan un total de 17 canales gratuitos, después de «haber afrontado diez años de inversiones millonarias en la creación y sostenimiento de los mismos».
Las frecuencias, un bien público
«Conviene recordar que el espectro radioeléctrico es un bien público de alto valor para la vertebración y cohesión social, y que la gestión del mismo que el Gobierno está ejecutando supone un serio revés a la libertad informativa, pero también inflige un grave daño a la industria audiovisual y de forma general a la economía española en un momento que, pese a los apuntes de recuperación, sigue siendo extremadamente delicado», añade.
En su repaso al sector, la asociación ha calificado de «cicatera» la administración del espacio radioléctrico, señalando que «los españoles son un 37,5% menos libres [en alusión al cierre de nueve canales] para elegir y disfrutar de contenidos informativos, culturales y de ocio».
Además, reitera que la transición al dividendo digital, concluida el pasado 31 de marzo, fue «deficiente» con una planificación «lenta, con demoras incomprensibles, escasa o nula colaboración con las televisiones», lo que, una vez más, favoreció en su opinión a las plataformas de pago.