Toñi se ha puesto fina

TELEVISIÓN

16 sep 2014 . Actualizado a las 10:40 h.

Pues sí, ayer volvió Toñi Moreno a la televisión, porque aunque se hayan cargado su programa insolidario, se ve que la pública apuesta por valores seguros y la quieren en la cadena. No importa la imagen patética que haya dado su antiguo espacio, porque ahora, y eso es lo realmente cutre de esta nueva temporada televisiva, lo que mola es esa pose «periodística» que se han empeñado todos en mostrar. Si Ana Rosa se fue a Gaza, Toñi Moreno, que como su nombre indica es conocidísima por sus reportajes intrépidos, se nos ha ido a Sierra Leona a mostrarnos (a su manera) el drama que viven con el ébola. Y, claro, ya no hay vuelta atrás en esta tendencia «ística» que vive la profesión del presentador de magacín. Que dan ganas como espectador de berrearles que no pasa nada, que no hay dolor con hablar desde un sillón y con los tacones puestos, que no es necesario cogerse la mochila y hacer de «mejuegolavidaenfalso». Que es mejor, mucho mejor, Toñi, que solo le preguntes, así de normal, al experto que te sienten al lado. Pero lo que gusta ahora es lo ístico. Toñi se ha puesto fina y si no fuera porque tengo que darle al rewind juraría que incluso ya no sesea. Que para entrevistar a Mariló hay que tener mucho poso «ístico», de ese que queda grabado: «Los abdominales de Bustamante son periodismo de investigación». Se lo dijo ayer a Toñi en exclusiva.