Viajar al fin del mundo en coche y sin gasolina es posible

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Pau García Milá, colaborador de «En el Aire» intentará cumplir este reto con un coche eléctrico

22 jul 2014 . Actualizado a las 21:48 h.

Recorrer los más de 1.200 kilómetros que separan Barcelona de Finisterre en un coche sin gasolina. Este es el reto que ha empezado hoy el joven emprendedor Pau Garcia Milà para demostrar que se puede ir hasta «el fin del mundo» en un coche eléctrico. Concretamente lo hará conduciendo un Renault ZOE, el primer vehículo 100% eléctrico de gran serie homologado con más de 200km de autonomía.

El viaje recorrerá el norte de España y tendrá una duración aproximada de quince días. Durante el trayecto, el también colaborador del programa En el aire, producido por El Terrat visitará ciudades como: Lleida, Zaragoza, Logroño, Bilbao, Santander, Gijón, Avilés, A Coruña o Santiago de Compostela.

Pau Garcia Milà inicia así el reto que lanzó en el último programa de la temporada: viajar de Barcelona al fin del mundo, Finisterre, al volante de un vehículo 100% eléctrico.

El Renault ZOE, posee el record mundial de distancia recorrida en 24 horas con 1.618 kilómetros. Con él no se emitirán emisiones de CO2, dióxidos de nitrógeno, partículas, ruidos y olores durante el reto. Además, se recarga en un tiempo entre 30 minutos y 9 horas, dependiendo de la potencia de la toma de carga.

Con este reto, además de hacer turismo, tratará de recargar el coche totalmente gratis a cambio de ayudar a diferentes personas que se encuentre en el camino. Todo ello se desvelará el próximo mes de septiembre con la vuelta del programa En el aire en septiembre, conducido por Andreu Buenafuente

En este viaje, Pau no estará solo, contará con el apoyo de algunos personajes mediáticos que lo sorprenderán con llamadas de ánimo o compartiendo con él algún tramo del recorrido. Bajo el hashtag #AlFinDelMundo se podrá seguir a través de las redes sociales en qué punto se encuentra el reto de Pau De Barcelona a Finisterre con el que se quiere demostrar que se puede ir hasta «el fin del mundo» en un coche 100% eléctrico.