El «selfie» ganó a la foto histórica

César Rodríguez Pérez
César Rodríguez JUEGO DE TRONOS

TELEVISIÓN

13 dic 2013 . Actualizado a las 19:23 h.

Se murió Mandela. Y decenas de jefes de Estado y de Gobierno volaron a Sudáfrica. Solo unos pocos, según algún rotativo ultra, no se atrevieron a ir. Los que fueron lo pasaron muy bien. El acto principal de las exequias, celebrado en el estadio Soccer City, fue noticia. Y trending topic.

El motivo no fue que el irrelevante -lo enviaron al poleiro- y muy futbolero Mariano Rajoy se emocionara por visitar el escenario donde Iniesta dio a España su único Mundial. Tampoco el apretón de manos entre los herederos del último gran conflicto de la guerra fría, Barack Obama y Raúl Castro: la Foto.

Histórica, controvertida, cargada de simbolismo y significado político, quedó eclipsada por otra imagen mucho más frívola y propia de nuestra sociedad conectada: un selfie, una autofoto. Se la hicieron el presidente de Estados Unidos con la atractiva primera ministra danesa y el sonrosado premier británico David Cameron. Las risas del hombre del Yes we can con la rubia Helle Thorning-Schmidt provocaron un baile de sillas. Michelle Obama tuvo que interponerse entre los dos. Y se levantó una gran polémica mediática. La ceremonia de Mandela quedó eclipsada por un coqueteo, un flirteo y una instantánea que demuestran que los líderes mundiales «son personas normales» a los que «también les gusta divertirse». Aunque gobiernen mal.