Un comunicador vocacional

La Voz

TELEVISIÓN

20 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Emilio Guillín (Santiago, 1976) es un periodista con más de quince años de experiencia en la comunicación. Profesional de vocación temprana -reconoce que a los nueve años ya quería tomar el camino que ha seguido- se enfrenta ahora a un nuevo reto profesional: el de presentar Xiz, la gran apuesta de V Televisión para esta temporada.

Guillín encontró su primer trabajo con 19 años en su ciudad natal. Debutó en Radiotelevisión Compostela. Allí cogió tablas y comenzó a estudiar Filoloxía galega. Pero decidió que su futuro estaba, en aquel momento, en otra parte. Cambió de facultad y de ciudad, y empezó Periodismo en Madrid, donde también hizo sus pinitos con la interpretación. Guillín reconoce que es una persona muy expresiva, una virtud y a veces, por exceso, un defecto. Afirma que su trabajo en Expansión Televisión, una cadena dedicada a la información económica, le sirvió para contenerse.

En su experiencia madrileña, Guillín tocó todos los palos. Trabajó en los servicios informativos de la ya desaparecida CNN+. Cambió de registro para trabajar en uno de los programas estrella de Antena 3 como es Espejo Público. Y para la audiencia gallega, Guillín no es un desconocido, tras su paso por Mundo verbena y Perdelo todo de Televisión de Galicia.

Tras los informativos, directos en exteriores, magacines, entretenimiento... ahora, un nuevo concurso. Otro reto en la carrera profesional de este compostelano que tendrá que demostrar diariamente sus habilidades de trato con los alumnos que participan en Xiz y con sus compañeros, que los apoyarán en el programa. Guillín reconoce que en un plató es donde se encuentra más cómodo. Es su medio natural. Tampoco le asusta la experiencia de trabajar con niños de entre nueve y doce años. A muchos de ellos ya los ha conocido durante la fase de producción del programa, en el recorrido realizado por el equipo de Xiz por toda la geografía gallega, visitando los colegios que participan en el concurso, conociendo a sus alumnos y profesores y palpando sus inquietudes. Admirador de Jesús Hermida y Julia Otero, Guillín demostrará, desde mañana, lo que aprendió de sus referentes.