Imanol Arias: «Jamás trabajaría para una cadena que insulta a mi familia»

Irene Perezagua MADRID.

TELEVISIÓN

El veterano actor vuelve a encarnar al patriarca de los Alcántara con la movida madrileña como telón de fondo en nuevos episodios de la serie de La Primera

22 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Con más canas de las habituales, por exigencias de guión, pero con la misma ilusión que hace diez años, cuando se metió por primera vez en la piel de Antonio Alcántara, Imanol Arias afronta la nueva temporada de Cuéntame cómo pasó , una de las apuestas más potentes de TVE de cara al otoño y que pretende reeditar el éxito de años pasados en los que se mantuvo líder de su franja horaria.

-¿Qué va a ser en esta nueva temporada de la familia Alcántara?

-Va a sufrir muchos cambios en sus vidas. Se mudan al barrio de Salamanca, se van a ver envueltos en la movida madrileña, que nacía al margen de la política como un movimiento de mucha libertad que trastocaba los principios de los padres. Y para colmo, los Alcántara tendrán de vuelta a su hija, que esta vez la interpreta Pilar Punzano, una compañera fantástica.

-¿Qué le ha enseñado Antonio?

-Sobre todo que la vida es un camino muy corto y que hay que vivir el presente plenamente. El pasado solo puedes recordarlo como una historia, no como un referente, y el futuro mejor no verlo con muchas expectativas o como algo preocupante.

-En la serie la política está muy presente...

-Sí, y sin embargo, confieso con toda tristeza que últimamente la política no me interesa, no la sigo. Soy un ciudadano que vota en blanco. No me parece que tengamos una representación inteligente. En ese sentido, me gustaban más los políticos de entonces.

-¿Cree que se echa en falta menos tensión?

-No, creo que España es un país muy guerracivilista. A mí por defender los derechos de los homosexuales me han llamado depravado, genocida, eunuco? y algunos se empeñan en meterme en el grupo de los de la ceja, cuando no lo soy, aunque creo que ser de la ceja tampoco supone mucho, visto lo visto.

-¿Cómo vivió usted la movida?

-No tenía un duro, pero lo más interesante de la movida fue la sensación de libertad que había. No creo que mucha gente hiciese negocio con ella, ni siquiera los locales. La mayoría de los que íbamos por allí estábamos invitados. Lo que sí hubo fue una sensación de cambios de horarios, de vida,?

-¿Y la crisis le ha pasado factura?

-Sí, claro. He cerrado momentáneamente la productora de Valencia. He tenido que disolver una empresa y despedir a empleados. Como bodeguero, hemos bajado un 20% las ventas del vino por la crisis.

-¿Estaría dispuesto a bajar su sueldo?

-Hombre se podría decir que llevo bajándome el sueldo desde 2004, porque no lo he subido desde ese año.

-Pero seguro que ha rechazado alguna que otra oferta jugosa?

-¡Y que lo digas! Me ofrecieron un cheque en blanco para empezar otra serie en una cadena privada.

-¿Y qué le hizo rechazarlo?

-Muy fácil, porque por la tarde me insultaban en un programa de esa cadena y yo jamás trabajaría para una cadena que insulta a mi familia. Aunque esté muerto de hambre y aunque los directivos sean íntimos amigos míos no lo haría.

-Ya por curiosidad, ¿era interesante la propuesta que le hicieron?

-No, además era bastante mala. Compraron una idea muy buena y la destrozaron antes de desarrollarla.

-Después de «Cuéntame», ¿le llegará algo de semejante calidad?

-Es difícil.