Mil personas quedan fuera del concierto de Sabina y Serrat en Pontevedra

L. Penide | A. Castroverde

TELEVISIÓN

Cuando se cerraron las puertas, no pudieron acceder a la plaza de toros, pese a tener entrada La policía tomó posición una hora después de que hubiera comenzado el concierto

18 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Fue toda una premonición. En unas pantallas gigantes, Iñaki Gabilondo simula el comienzo de un telediario ironizando con la lamentable organización del concierto de Sabina y Serrat, dado que ambos supuestamente estaban desaparecidos. Mientras una abarrotada plaza de toros de Pontevedra atendía al periodista, la organización cerraba las puertas de acceso al recinto. Fuera se quedaban cerca de un millar de personas, la mayoría de ellas con entrada, y a las que se les impidió asistir al recital. Se vivieron momentos de tensión. Algunos de los enfurecidos seguidores la tomaron con contenedores de basura y vallas metálicas, otros optaron por medidas más expeditivas. La puerta metálica del tendido tres empezó a sufrir las acometidas de la gente. La seguridad se las vio y se las deseó para contener a la muchedumbre. Ésta gritaba «fuera, fuera», por encima de las voces de los dos artistas, que, eso sí, estaban ofreciendo todo un espectáculo musical a los más de 6.500 seguidores que había dentro. Una hora después de cerrarse los accesos, una quincena de policías nacionales se colocaron en la puerta. La situación se fue normalizando. Antes de las doce llegaron los antidisturbios ?al cierre de esta edición, no habían intervenido? y 30 minutos después se abrió la puerta para la salida del concierto.