Dos personajes morirán en la entrega final de las aventuras de Harry Potter

La Voz LA VOZ | REDACCIÓN

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VADIM GHIRDA

27 jun 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

La escritora británica J. K. Rowling ha comenzado a dar pistas sobre el séptimo y último libro de las aventuras de Harry Potter, que todavía no está finalizado. Los indicios han sobresaltado a los numerosos seguidores de la serie, ya que la creadora del célebre aprendiz de mago ha adelantado que dos personajes «muy queridos» se encontrarán con la muerte. La autora, reacia a las entrevistas, acudió a uno de los programas de mayor audiencia del Reino Unido, el show vespertino de Richard y Judy, que cuenta con su propio club de libros. Sus anfitriones trataron de sonsacarle más datos, pero Rowling sólo confirmó que las muertes llevarán los nombres de personajes principales y que uno más, que podría parecer condenado, se salvará: «Hay que pagar un precio. Aquí estamos tratando con malvados de verdad y ellos no van a por los personajes secundarios ¿no? Van a por los protagonistas». Con estos datos, las especulaciones se centran en el trío protagonista: Harry Potter, Hermione y Ron. ¿Quién de ellos se salvará, si es que son ellos los llamados a desaparecer? Si Rowling sigue a sus héroes, Harry tiene todas las probabilidades: «Entiendo perfectamente la mentalidad del autor que piensa 'bien, voy a matarlos porque así no podrá haber secuelas'; cuando yo muera no podrán resucitarlos. Agatha Christie hizo eso con Poirot, ¿no?», confesó. Rowling parece querer evitar que otros autores resuciten al personaje una vez que cierre su serie de siete volúmenes, los que tenía en mente desde el principio. De hecho, en televisión explicó que el capítulo concluyente ya lo escribió en 1990, cuando era una madre soltera que comenzaba a esbozar las aventuras de un personaje que ahora la han convertido en multimillonaria. Rowling también es consciente de que matar a un personaje tan popular como Harry le granjeará las antipatías de muchos lectores y, por ello, prefiere no adelantar más datos. Un hermetismo que está perjudicando a su hija de 11 años: en el colegio sus compañeros la acosan para que cuente lo que sabe de la conclusión de los libros.