La actriz presentó en Barcelona su nueva película, que se estrenará el próximo viernes «Una mujer de color tiene que abrirse camino en esta industria», afirmó la intérprete
30 jul 2004 . Actualizado a las 07:00 h.La actriz Halle Berry dio una lección de dulzura y de simpatía, muy lejos del papel felino que interpreta en Catwoman , película cuya presentación europea se celebró ayer en Barcelona. La oscarizada actriz de Monster's Ball concentró una gran expectación en la sala del hotel habilitada para la presentación del estreno de esta cinta, que llegará a las pantallas españolas el próximo viernes. Berry, vestida con tonalidades claras, era seguida por una nutrida representación de periodistas de varios países como Italia, Grecia, Serbia o Francia. La actriz, rodeada por algunos compañeros de rodaje como Benjamin Bratt y Lambert Wilson y por el director del filme, el francés Pitof, era el centro de todas las miradas. Entre tanta expectación, la artista estadounidense se manejó a su antojo con una naturalidad, muy alejada del personaje que interpreta en Catwoman donde da vida a una heroína con poderes gatunos que se enfrenta a una compañía de cosméticos al descubrir por casualidad el tórrido secreto de un producto antienvejecimiento. Esta vez el personaje de cómic tapado por Batman adoptará su propio protagonismo. Catwoman es una seductora criatura enjaulada en un espectacular traje negro bajo el que se esconde un arsenal de fuerza, agilidad y unos sentidos muy agudos. «Adoro los gatos, especialmente ahora que soy uno», broméo la actriz. Un personaje felino con el que inaugura el papel de la mujer como heroína de cómic en el cine. «Una mujer de color en esta industria tiene que abrirse camino. He arriesgado más que otras mujeres porque no he tenido tantas oportunidades», aseguró. Siguiendo esa tesis escogió el papel de Catwoman para cambiar la rutina habitual. «Las actrices siempre daban todo su apoyo a los actores protagonistas en películas como Batman, Superman o Spiderman , ahora es un hombre el que ayuda a la mujer protagonista en apuros», concretó. Un papel que interpreta un atractivo policía al que da vida Benjamin Bratt, que quedó rendido ante los encantos de su compañera de reparto. «Sabía que no iba a ser el número uno, sino que me correspondía un papel de apoyo en la historia», dijo el actor. Como Catwoman, Berry se enfrenta a Sharon Stone, una malvada supermodelo y esposa del propietario de la compañía de cosméticos. «Ha sido una lección fantástica trabajar con Sharon. Lleva muchos años en la industria y es conocida como la clásica femme fatale, que reforzaba aún más su papel en la película», afirmó. Artes marciales Para dar vida a su personaje, Berry tuvo que aprender artes marciales, hacer pesas con un entrenador personal y estudiar los movimientos felinos. No obstante, la actriz, mucho más desenvuelta y simpática que algunos de sus compañeros en Hollywood, admitió sin problemas la ayuda de «cuatro dobles».