El jurado dice que representa «la imagen plural de la literatura europea al comienzo del siglo XXI» Su candidatura fue elegida por mayoría entre las 35 aspirantes
11 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.El escritor italiano Claudio Magris ha sido galardonado con el premio Príncipe de Asturias de las Letras 2004, según la decisión mayoritaria del jurado presidido por el director de la Real Academia Española, Víctor García de la Concha. Entre sus méritos han destacado el de representar «la mejor tradición humanista y la imagen plural de la literatura europea al comienzo del siglo XXI». La candidatura de Magris resultó elegida entre las 35 que optaban al galardón y había sido propuesta por dos personalidades que cuentan en su haber con el Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales: Hans Magnus Enzensberger y Ryszard Kapuscinski. Según el jurado, Magris encarna «una Europa diversa y sin fronteras, solidaria y dispuesta al diálogo de culturas» y en sus libros muestra «una poderosa voz narrativa, espacios que componen un territorio de libertad y en ellos se configura un anhelo: el de la unidad europea en su diversidad histórica». El ensayista y polifacético escritor nació en Trieste en 1939. Tiene publicados importantes estudios sobre las relaciones de las culturas italiana y germánica y sobre la importancia del mundo cultural mitteleuropeo, es decir, sobre el predominio del alemán en la cultura de la Europa central. Destaca como traductor de Ibsen, Kleist y Schnitzer y en su obra se mezclan el ensayo, la novela y en relato de viajes. Títulos destacados En su obra, destacan títulos como El anillo de Clarisse: tradición y nihilismo en la literatura moderna, Conjeturas sobre un sable, Otro mar, Microcosmos, La exposición o Danubio. Éste no es el primer reconocimiento importante que recibe en España, ya que obtuvo el premio periodístico Juan Carlos I por su artículo titulado El titiritero de Madrid , publicado en el diario Corriere della sera , en el que escribe con asiduidad. Claudio Magris logró hacerse con el galardón al imponerse en las votaciones finales al norteamericano Paul Auster y al checo, Milan Kundera. La decisión del jurado fue adoptada por mayoría y contó con la oposición vehemente de algún miembro, como Fernando Sánchez Dragó, sonoramente disconforme con la decisión mayoritaria y dijo, nada más hacerse público el fallo, que Magris «es todo lo contrario» de lo que dice el acta del jurado.