Eminem da el salto a la gran pantalla

Bárbara Celis D'Amico NUEVA YORK | CORRESPONSAL

TELEVISIÓN

06 feb 2003 . Actualizado a las 06:00 h.

El estreno estadounidense de 8 millas , protagonizado por el rapero Eminem, estuvo precedido por un ambiente de escepticismo: otra vez un cantante intentando aprovecharse de la fama para ser actor. Los últimos experimentos del género, como la innombrable película que protagonizó Mariah Carey el pasado año y que no duró en cartel ni tres semanas, habían dejado claro que hay que tener verdadero talento para pasar del micrófono al celuloide sin perder la dignidad. Pero Eminem sorprendió gratamente incluso a sus detractores. 8 millas , producida por Brian Grazer ( Una mente maravillosa ) y dirigida por Curtis Hanson, autor de la ganadora del Oscar L.A. Confidencial , es una película entretenida, bien filmada, estupendamente actuada en la que Eminem no tiene nada que envidiarle al resto de los actores profesionales que aparecen en ella. Claro que buena parte del mérito habría que otorgárselo precisamente a Hanson, que vuelve a demostrar que tiene mano con la dirección de actores. Si en L.A Confidencial consiguió que Kim Basinger se llevase un Oscar por su interpretación, aquí la actriz, que interpreta a la madre alcoholizada del rapero, vuelve a demostrar que bien dirigida puede ser una gran intérprete. Lo más memorable de la película es la banda sonora, y las apuestas por el Oscar siguen pujando alto. La trama de 8 millas , sin ser autobiográfica, sí habla de algunos de los problemas por los que ha atravesado Eminem antes de ser estrella- rapero blanco en un mundo musical de negros, familia disfuncional, y cómo no, batallas de riffs con otros raperos para demostrar que ser blanco no significaba no tener talento para el hip hop . La historia, filmada con ese particular estilo de Rodrigo Prieto ( Amores perros ), se desarrolla en un suburbio de Detroit y su estructura es absolutamente clásica: chico inseguro conoce chica y gracias a ella, y a pesar de ella, que le traiciona con un amigo suyo, consigue ganar el concurso de raperos más importante de la temporada. Con esta película Eminem no sólo se ha ganado a un nuevo público, el de cinéfilos, sino que ha conseguido sacudirse su fama de provocador. Con canciones como I don't give a fuck ( Me la pela) o declaraciones agresivas en las que no deja títere con cabeza, el rapero nunca ha tenido buena prensa como persona en EE.UU. Después de 8 millas y de haber trabajado duro para hacer un buen papel en la pantalla, Eminem se ha ganado el respeto popular.