El inesperado Oscar a Halle Berry

La Voz

TELEVISIÓN

04 abr 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

Cuenta la propia actriz que aceptó el papel por lo mucho que tiene de autobiográfico, ya que ella misma es hija de una ciudadana británica blanca, casada con un alcohólico de color, que las maltrataba. Su madre matriculó a sus hijos en un colegio blanco, lo que les obligó a superar no pocas barreras, muchas de ellas raciales. Berry llegaría a ser presidenta de su clase y reina de su promoción, que no la excluyó de ser acusada de falsificar los resultados. Sus convicciones reivindicativas en favor de la cultura afroamericana afloraron en la propia ceremonia del Oscar, al recordar a la audiencia de que su estatuilla era un hito histórico, y que a partir de ese momento el Oscar se abría a sus compañeras negras, que hasta entonces nunca lo habían recibido. Diabética Nacida en Cleveland, Ohio, en 1968, no le importa confesar sus limitaciones al reconocerse diabética y también con una pérdida de un oído del ochenta por ciento, ambas claramente compensadas con un físico extraordinario que le lleva a encarnar a la villana letal Linx en el nuevo Bond. Por cierto, la filmación de esta nueva película comenzó hace algunas semanas en Londres y desde ayer incluye entre sus exteriores a la ciudad de Cádiz, caracterizada como una localización de La Habana.