El escritor italiano presentó en Madrid su última obra «Se está haciendo cada vez más tarde» Antonio Tabucchi llegó al Círculo de Bellas Artes directamente desde París. Y sin maleta. La seguridad de los aeropuertos no afecta aún al equipaje de los clientes. Ni siquiera cuando se trata de uno de los mejores escritores europeos contemporáneos. Tabucchi llegó sin equipaje, sin la camisa nueva que se compró para estrenar ayer, pero con su último libro. «Se está haciendo cada vez más tarde» ha tardado cinco años en convertirse en el último heredero del legado del escritor, en el sucesor de «La cabeza perdida de Damasceno Monteiro». Tabucchi se asoma de nuevo a la fotografía de la vida desde su ventana privilegiada.
19 mar 2002 . Actualizado a las 06:00 h.Tabucchi, el escritor, ha vuelto. El otro, la conciencia frente a lo que él llama «locura universal», nunca se fue. Cinco años después de La cabeza perdida de Damasceno Monteiro , el escritor italiano presentó ayer en Madrid su última obra: Se está haciendo cada vez más tarde, una novela formada por un total de 17 cartas sin fecha, sin destinatario, pero unidas por un remitente común, defensor de la «locura de bolsillo» que cada individuo debe disponer a su antojo. Se trata de una novela «polifónica, caleidoscópica», en definición de su traductor al castellano, Carlos Gumpert, fascinado por el «desasosiego» que le creó su lectura. Espiando la vida Sus críticos dicen que no tiene nada que ver con su última obra, ni siquiera con «Sostiene Pereira». Y para buscar semejanzas bucean en la primera bibliografía, en la que, como ahora, Tabucchi recurre a la memoria y a la ruptura del tiempo para «espiar a la vida». Aunque el escritor reconoce que la «inquietud» que produce su obra sólo se explica cuando el hombre se da cuenta de que «la vida nos está espiando». Acompañado de dos expertos en literatura italiana, Manuel Gil Esteve y Mercedes Monmany; de su editor, Jorge Herralde; de un amigo, Enrique Vila Matas; y de su traductor; Antonio Tabucchi reflexionó en el Círculo de Bellas Artes sobre su obra, sembró la intriga ¿más aún¿ sobre la pareja que se abraza en la portada de su último libro y reivindicó la memoria y la libertad para enfrentarse al tiempo. Y evitó la palabra «amor». A pesar de que Gumpert dejó claro que el tema central de Se está haciendo cada vez más tarde no es otro que el amor, la sensualidad. Entendido al estilo Tabucchi.