Hollywood mantendrá la entrega de sus premios para luchar contra el terrorismo

ROCÍO AYUSO LOS ÁNGELES

TELEVISIÓN

TINA BURCH

La ceremonia de los Oscar se celebrará el próximo febrero en medio de un amplio despliegue de medidas de seguridad 9 La temporada de premios en Hollywood se aproxima y también la inquietud sobre si será posible celebrar la entrega de los Oscar y los Globos de Oro por la creciente incertidumbre que vive el país.«El espectáculo debe continuar», parafrasean todos los encargados de estas ceremonias, ya sean los Grammy, los Oscar, los Globo de Oro o cualquier otro galardón que supone el pan nuestro de cada día entre los meses de enero y marzo. Sin embargo, desde el 11 de septiembre se suspendió por completo la ceremonia los Grammy Latinos, y los Emmy fueron aplazados dos veces y con una nueva fecha para el 4 de noviembre.

21 oct 2001 . Actualizado a las 07:00 h.

«Nos han animado a seguir adelante con este acto como parte de la vuelta a la normalidad a la que se está llamando a la población», señaló el presidente de CBS, Leslie Moonves, sobre el tercer intento de llevar a cabo la 53 edición de los Emmy. El mismo espíritu de optimismo reina entre el resto de los promotores de unas entregas de premio que son la vida de Hollywood. Como asegura la revista Variety, todo el mundo sigue adelante con la esperanza de que las cosas se calmen para principios del próximo año. Pero el temor es un hecho a juzgar por las recientes suspensiones de premios, así como el estado de preocupación que existe en el país. Son numerosas las estrellas que han expresado su recelo a volar, obligando a los estudios a promocionar sus películas como las teleconferencias con los periodistas. Seguridad Además están las medidas de seguridad que rodean una ceremonia de esta envergadura, capaz de reunir en una misma alfombra roja a la mayor concentración de estrellas sobre la Tierra en un acto que se retransmite en directo. En sus 73 años de historia, los Oscar, por ejemplo, nunca han faltado a su cita aunque en tres ocasiones lo hicieron con retraso, por culpa de unas inundaciones (1937) o en respeto al funeral de Martin Luther King Jr. (1968) y al intento de asesinato del entonces presidente Ronald Reagan (1981). Incluso durante la Segunda Guerra Mundial, tras el ataque a Pearl Harbor, el espectáculo continuó, aunque con modificaciones para hacerlo más austero, seguro y patriótico. Como recordó Moonves, en el deseo de continuar con las celebraciones de Hollywood «hay mucho dinero en juego». No sólo se trata de mantener el espíritu festivo de la industria, sino de continuar con una de las principales fuentes de ingreso de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, entre otras entidades relacionadas con el cine.