Patrocinado por:

«Con el blockchain hay un cambio de paradigma, la economía ya no se basa en el capital sino en la interacción de las personas»

OCIO@

EthicHub lanza el token Ethix, una criptomoneda basada en la comunidad de prestamistas y agricultores cafeteros mexicanos. Hablamos con sus responsables, Jori Armbruster y Gabriella Chang

27 sep 2019 . Actualizado a las 11:47 h.

Los desarrolladores Jori Armbruster y Gabriela Chang visitaron la sede de ImpactHub en Vigo para explicar su proyecto de plataforma de préstamos EthicHub. Es una fintech basada en contratos inteligentes con tecnología blockchain. La idea es invertir en préstamos sin intermediarios para agricultores de países emergentes, por ejemplo, los cafeteros de Chiapas, en México. Para redondear el plan, están emitiendo su propia criptomoneda o token de utilidad, el Ethix. Fueron invitados a dar una conferencia por la Asociación Galega de Blockchain e IoT (Agalbit). A su charla acudió el vigués Alejandro Regojo, el joven que cofundó la criptomoneda Bitcoin Gold. En la entrevista habla Armbruster, acompañado por Chang.

Estáis visitando varios países de Europa para presentar vuestro proyecto de la plataforma EthicHub. Es de suponer que se respira un gran ambiente respecto al «blockchain» y la criptomoneda.

(Jori Armbruster) No solo hemos estado viajando por Europa, también hemos ido a Japón, Corea, China, Singapur, Estados Unidos y México. En este último país tenemos oficina para la captación de proyectos. Ponemos en contacto al inversor con agricultores del otro lado del mundo que están acostumbrados a pagar unos intereses muy altos.

¿En qué favorece el blockchain a estos proyectos?

Es la tecnología que soporta esto, es necesario para que funcione. Hubo más ambiente antes especialmente, ahora no, quizás en Vigo sí pero a nivel global la moda ha entrado en crisis porque subió demasiado rápido.

¿Reventó la burbuja?

Sí, se parece a la burbuja de las puntocom [1999-2000]. Creció demasiado rápido, eso iba a cambiar el mundo y, de repente, se pinchó y la gente ya no creía en Internet. Pero realmente las puntocom cambiaron el mundo. Hoy en día las firmas más grandes del mundo son Facebook, Apple, Amazon, todas empresas puntocom. Esa nueva tecnología sí cambió el mundo pero no ha ido tan rápido como la gente esperaba. Seguramente, el blockchain va a cambiar el mundo pero no tan rápido, ahora estamos en la fase de decepción pero va a volver a ponerse de moda.

EthicHub va a emitir una criptomoneda llamada Ethix. ¿Cuándo será la ICO (oferta de lanzamiento)?

No nos gusta llamarla ICO sino «token sale». Será algo que se está poniendo de moda, una nueva tendencia en este mundillo, será una emisión continuada en vez de hacerla en un momento dado. Yo la pongo a funcionar y van a ir entrando usuarios, que es el objetivo de nuestro token de utilidad.

¿Cuál es la diferencia?

Hay dos tipos de token, los de utilidad, como el nuestro, que es más parecido a un servicio, que es lo que nosotros vendemos, y los más de criptomoneda, más equivalentes a una moneda o acción. Nuestro token te da un servicio que es el acceso a nuestra plataforma. Si quieres prestar cien, tienes que comprar diez. Dos tokens quedan guardados en una bolsa de compensación por si, al final, esos agricultores no pagan. Quieras que no, hay un riesgo de impago o influye la volatilidad del peso mexicano, porque los agricultores cogen y devuelven de préstamo en esa moneda nacional. Hay un riesgo de tipo de cambio y si uno de esos eventos ocurre, el inversor recibe Ethix de esa bolsa para compensar su pérdida.

¿Por qué prestar dinero en Ethix y no en euros?

Realmente, lo que prestamos es una criptomoneda llamada Dai (DAI). Esta moneda vale un dólar, es como si estuvieses prestando dólares, pero los agricultores necesitan pesos mexicanos, por lo que se convierte a pesos. Ahí es donde existe ese riesgo de tipo de cambio entre el peso mexicano y el dólar. Y luego existe otro riesgo, que es el de impago. El objetivo de nuestro token, que no es una criptomoneda sino que es un token realmente porque no tiene una blockchain propia sino que nos construimos sobre la blockchain de Ethereum, es mitigar esos riesgos de tipo de cambio e impago.

(Gabriela Chang) Pero a la pregunta de por qué no se utiliza fiat (moneda real) para enviar el dinero y por qué se usa blockchain es porque, si no fuera por esos tokens, los euros no los podrías contabilizar, ni saber con certeza que van y vienen, no los puedes poner en un smartcontract. Se trata de tener confianza, si yo te voy a pedir que tengas confianza para prestarle dinero a gente del otro lado del mundo, lo que descentraliza esa confianza es blockchain porque tú sabes que tu dinero va a ir directamente a la otra persona. No te estoy pidiendo que me lo des a mí para que yo lo administre, sino a esa tercera persona. Y eso solo lo permite la blockchain. Y además crea un registro del historial de repago de estos agricultores, que a día de hoy son buenos pagadores pero como sus préstamos son en efectivo no queda un registro de esto. La blockchain permitirá que se haga un registro de ese historial crediticio de los usuarios.

Pero el dinero no llega directamente al agricultor sino a un nodo local, al prestamista del pueblo.

(Gabriela Chang) No tenemos intermediación financiera. El nodo local es una persona que selecciona los proyectos previamente para subirlos a la plataforma solo si cumple las condiciones para tener esta tasa de pago inferior al 3 %. Cualquiera puede participar en la plataforma como inversor mientras haga la identificación de usuario (costumer) pero no cualquiera puede pedir dinero, solo gente que cumple unos ciertos requisitos para ser capaz de pagar la deuda. Quien selecciona a esas personas es el nodo local (un intermediario no financiero), y luego entre ellos eligen a un representante local, en el que más confíen en la misma comunidad, para que ese sea el que reciba el dinero y debe abrir una cuenta de banco (están todos desbancarizados). El intermediario financiero que eligen es el que saca el dinero y se lo da a ellos. En la segunda etapa, en la que estamos asociados con Mobilum, van a poder prescindir de la banca. Cada uno de los agricultores va a tener una tarjeta de débito nominal a la que le llegarán directamente las transferencias del smartcontract. Y así como yo puedo gastar pesos con una Visa y pagar euros, ellos podrán pagar sus gastos con estas tarjetas.

¿Los agricultores pagarían con Ethix?

(Jori Armbruster). No, con el DAI, que es como un criptodólar.

(Gabriela Chang). El DAI es un proyecto que se está haciendo con una moneda estable, va paralelo al dólar.

¿Por qué tenéis interés en contar vuestro proyecto en Vigo?

Sobre todo porque el organizador de la charla, Antonino Comesaña, ha estado muy vinculado al proyecto y nos ha ayudado con el desarrollo del seguro de tipo de cambio, incluso ha contribuido en la conceptualización de para qué sirve el Ethix en nuestro ecosistema. Es un embajador de nuestro proyecto y las labores de estos consisten en generar una comunidad local. Es lo que está haciendo él aquí, montar un evento en el que habla de EthicHub y de blockchain. Al final, la comunidad sabe de esto y le interesa también a una persona que tenga ahorros en el banco ganando relativamente poco por su dinero y podrá ver en EthicHub una oportunidad de diversificar sus ahorros porque aquí puede ganar hoy por hoy un 15 % sin los seguros, cuando esté implantado el sistema con nuestro token de cobertura de una zona de estos riesgos podrá ganar un 10 % con un riesgo moderado. Los agricultores están acostumbrados a pagar unos intereses muy altos y hay mucho que ganar entre lo poco que a tí te paga el banco y lo mucho que pagan ellos en intereses. Por el camino, hay acuerdo de negocio.

Entre los asistentes a la charla de EthicHub estaba otro emisor de criptomonedas, el vigués Alejandro Regojo, cofundador de Bitcoin Gold.

Lo hemos conocido ahora en Vigo. Él ha formado parte de ese proyecto y realmente las monedas no son de nadie, son de las comunidades. Es uno de los cambios de paradigma de blockchain, al final una moneda vale porque hay una comunidad detrás de esa moneda. Yo por emitir monedas nadie me las compraría, las compra la gente que quiere participar en un proyecto. Al final, los dueños de ese proyecto son los usuarios, los que tienen esa moneda.

Al lanzar esa moneda Ethix tenéis interés en crear comunidad de usuarios.

(Jori Armbruster) Sí, para eso está Antonino Comesaña y otros embajadores, para hablar con la prensa, explicar qué es EthicHub, hacer un meetup e invitar a la gente.

(Gabriela Chang). Para que la gente se entere para qué sirve, porque lo más importante que tiene un proyecto de blockchain, cualquiera, no solo el nuestro, es la comunidad. Hoy, con la tecnología, cualquiera puede cortar y pegar el código fuente de la blockchain y crearse su propia moneda pero ¿qué valor tiene ese si no hay una comunidad que lo haya adoptado y lo soporte? Lo que permite la tecnología blockchain es, en este cambio de paradigma, que la economía ya no se basa en el capital sino en las interacciones de las personas. Es como volver al trueque y tener algo que lleve el registro de lo que estamos intercambiando, sea tiempo, actividades o bienes, lo que se llama un Internet de valor.

¿Algún mensaje a los usuarios?

(Jori Armbruster). Invitamos a todos a seguirnos en nuestras redes sociales y si les interesa este proyecto pueden registrarse en nuestra web tanto para participar en la venta de nuestros tokens como para prestar ya a los agricultores mexicanos porque ya está operativa la plataforma.

(Gabriela Chang). Tenemos abierta también una plataforma de donaciones para un proyecto piloto con la fundación Triodos, que nos ha dado su confianza y nos ha cedido su plataforma de crowdfounding, para crear un pequeño fondo exponencial para financiar estas primeras comunidades y ayudarles a construir su historial crediticio. Es un fondo regordete donde todos los beneficios se vuelven a utilizar para seguir prestando.