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Google Nest Hub: ¿es útil un altavoz inteligente con pantalla?

J. A.

OCIO@

EUROPA PRESS

El panel de 7 pulgadas de este dispositivo permite visualizar información útil para afrontar el día, como ver el tiempo, una ruta de Google Maps, recetas de cocina o instrucciones

19 jul 2019 . Actualizado a las 19:43 h.

En mayo pasado, la conferencia de desarrolladores de Google alumbró un nuevo dispositivo vinculado al lucrativo negocio de los asistentes digitales. Nest Hub es un altavoz digital cuya principal peculiaridad es que incorpora una pantalla de 7 pulgadas estilo tablet, y aquí es donde viene la pregunta: ¿Es necesario un panel de este tipo en un aparato pensado para manejar eminentemente con la voz?

Lo primero que percibmos de Nest Hub es su atractivo diseño. Esta pensado «para que encaje a la perfección en tu hogar, y esperamos que lo veas no solo como algo funcional, sino como parte de la decoración», explican en la compañía del buscador. La pantalla es como una imagen flotante con el tamaño justo para adaptarse a cualquier ambiente de nuestra casa, y lo suficientemente grande como para poder disfrutar de las fotos en el lugar que elijamos. Y es que precisamente, podría decirse que se trata de una fusión entre los modernos altavoces y los hace años caídos en desuso marcos de fotos digitales.

El dispositivo está muy bien construido, con suaves curvas redondeadas, y se adapta de manera natural a cualquier espacio, aunque en Google recomiendan situarlo en la encimera de la cocina o en la mesilla de noche. Hay dos colores a elegir, tiza y carbón, para que encaje con cualquier ambiente, aunque esto afecta solo a la base (donde está el altavoz) porque en los dos casos la pantalla tiene marco blanco.

En la parte superior del dispositivo se encuentra en sensor de luz Ambient EQ, que permite a la pantalla ajustarse automáticamente a la luz que haya en la habitación. Esto significa que no produce brillos. Cuando es la hora de dormir, Nest Hub lo sabe y atenúa la pantalla para no molestar durante la noche, algo que hemos comprobado personalmente (lo ubicamos en el dormitorio).

Controlar el hogar conectado

La clave de Nest Hub está precisamente en esta última palabra (hub), ya que actúa como un centro de control de cientos de dispositivos inteligentes para el hogar de múltiples marcas. Todos los miembros de la familia pueden ver y hacer funcionar a través de él los aparatos desde un único panel de control, sin necesidad de tener que cambiar de aplicación. Simplemente hay que deslizar hacia abajo con el dedo para acceder a la función Vista de la Casa: esto permite atenuar las luces de las bombillas Philips Hue, ajustar la temperatura con Nest Thermostat, controlar la televisión con Chromecast, monitorizar cámaras inteligentes o encender pequeños electrodomésticos solamente con la voz.

El sonido del altavoz es nítido y claro, y si lo hemos programado Google Nest Hub animará con música el momento de los deberes o de la preparación de la comida. Cuando lo adquiere, el usuario obtiene automáticamente tres meses de YouTube Premium para disfrutar no solo de YouTube Music, sino de todo YouTube sin anuncios. También se puede escuchar a través de él la música de Spotify o cualquier otro servicio de música (con o sin suscripción). El sonido, sin ser tan potente y lleno como el de un HomePod de Apple, cubre perfectamente el tamaño de una habitación normal.

La pantalla permite visualizar información útil para afrontar el día. Por ejemplo, podemos decir «OK Google, buenos días» para obtener un resumen visual de las actividades que tenemos en el calendario de Google, la ruta hasta el trabajo con Google Maps, los últimos recordatorios, la previsión del tiempo, los últimos titulares de noticias, entre otras tareas. Desde Mountain View (California) aseguran que irán agregando más socios de contenido en el futuro. Y gracias a Voice Match, hasta seis personas dentro del hogar pueden obtener propias actualizaciones.

Además, se puede utilizar la voz para explorar millones de recetas, poner temporizadores o convertir medidas, todo ello sin necesidad de usar las manos. «Nos hemos asociado con Canal Cocina, Qué Apetito, Petit Chef y Tastemade. Simplemente di 'Ok Google, qué podría hacer esta noche para cenar' y te aparecerán cientos de recetas diferentes, con indicaciones paso a paso que podrás interrumpir en cualquier momento e incluso reproducir música mientras las preparas», explican. Otro ejemplo; supongamos que no estamos seguros de cómo cortar una fruta, pues le decimos «Ok Google, enséñame cómo cortar una piña» y nos muestra infinidad de videos tutoriales de YouTube. Si estamos en medio de la preparación de una receta, se detendrá para reproducir un vídeo de YouTube en el que explique cómo hacerlo de la forma correcta.

También se ha pensado en la posibilidad de utilizar Nest Hub en un negocio. En un pequeño hotel rural se puede recibi ayuda adicional a la hora de comunicarse con clientes en otros idiomas. Con la función «Ok Google, sé mi intérprete» ya es factible dialogar en cientos de idiomas en directo, además de mostrar a los huéspedes cómo llegar al restaurante más cercano, la historia del monumento más cercano o fotos de las visitas recomendadas.

Como decíamos anteriormente, Nest Hub es un marco de fotos que se puede personalizar directamente desde la app de Google Home. Así podremos disfrutar de una selección de nuestras mejores fotos de forma automática y siempre actualizada, recordar momentos con familiares y amigos incluso cuando Google Nest Hub no está siendo utilizado. Google Fotos añadirá automáticamente nuevas fotos, evitando duplicidades o capturas borrosas. Tambié se puede compartir álmues con un familiar.

El dispositivo se puede adquirir por 129 euros, en Google Store, páginas web de Orange y en El Corte Inglés, Media Markt y la FNAC, así como también en Carrefour, Worten y Leroy Merlin. La instalación es prácticamente plug&play, solo hace falta conectarlo a nuestra red wifi a través de la app Google Home del smartphone. Y para aquellas personas preocupadas por la privacidad, un botón trasero permite desconectar el micrófono cuando no queremos que nos esté escuchando.