El Gobierno prevé una inversión de las operadoras de 1.500 millones hasta el 2019
29 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El despliegue de la red de súper banda ancha móvil 5G ya ha empezado, y España, aunque no quiere demorarse, no prevé estar en los puestos de avanzada. Antes, el Gobierno prefiere fijarse en la experiencia de otros.
El primer paso se dará en marzo, con la subasta de espacio en las bandas de 1,5 gigahercios (GHz), ahora desocupada en gran medida; y de 3,5 GHz. Para los siguientes tramos (de 700 mgh y 26 GHz) habrá que esperar al 2019 e incluso puede que principios del 2020.
El 19 de febrero finaliza el plazo de consulta pública que dio el Ministerio para recabar propuestas e información que contribuya a diseñar el Plan Nacional 5G (ya existe, aunque todavía no es definitivo).
Las aportaciones están abiertas a administraciones, operadores, empresas o consumidores.
Después se dará a conocer el programa, y se verá lo que va a pasar con el segundo dividendo digital. Se trata de mover a otra banda las cadenas de TDT (habrá que resintonizarlas), ya que, para desarrollar el 5G será necesario liberar frecuencias (de 694 a 790 Mh) y una de cada cuatro televisiones emiten en torno a los 700.
La UE obliga a todos sus estados a concretar los planes de despliegue durante este primer semestre, aunque la liberación total de las frecuencias necesarias podría demorarse dos años, hasta el 30 de junio del 2020.
La banda de los 700 MHz permite coberturas geográficas muy grandes, de modo que es ideal para extender las redes 5G de forma masiva. Las frecuencias en torno a los 26 GHz son capaces de llegar a velocidades muy altas (hasta 10 gigas por segundo) pero su cobertura está limitada por debajo de los 100 metros.
Frecuencias disponibles
Por eso, en el departamento de Nadal no ven prioritario su desalojo -aunque ven «complicado» llevarlo más allá de los plazos de la UE-, y estiman que el desarrollo comercial del 5G podría empezar en España sin ellas. Las operadoras también prefieren esperar al 2019 e incluso hasta el 2020, siempre que para entonces estén liberadas del todo.
La clave, según Telefónica, Vodafone y Orange, es que estén disponibles para su uso «inmediatamente» después de entregar las licencias. Un precedente «muy malo» Es justo lo que pasó con el primer dividendo digital, cuando tras adjudicarse entre las telecos la banda de 800 MHz ocupada por la TDT tuvieron que pasar años hasta su disponibilidad plena.
En juego hay mucho dinero. En España, según los analistas de Barclays, se estima una inversión por las operadoras de 1.535 millones de euros solo en las dos principales subastas. En Alemania se esperan captar 2.000 millones y en Italia cerca de 2.500.
Si añadimos el coste posterior de despliegue de las redes y sumamos a todos los países de la UE, la inversión global superará los 200.000 millones de aquí al 2020, estima el consejero delegado de Orange, Stephane Richard.