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Desconectar del móvil durante las vacaciones, un «detox» digital

yohana silva / m.C. REDACCIÓN / LA VOZ

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P.CHAPELA

El 60% de los españoles reconocen que no se apartan del teléfono ni cuando descansan

23 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Descansar y relajarse. Esto es lo que se presupone que quiere la gente cuando decide irse de vacaciones. Desconectarse de todo lo que hace durante su rutina diaria para volver con las pilas cargadas al mundo del trabajador. Pero ¿realmente la gente es capaz de desconectar del todo? Si uno se para a reflexionar sobre qué es lo primero que hace cuando tiene un minuto libre, probablemente se visualizará a sí mismo con el móvil en la mano o frente de la pantalla del ordenador. Y aunque no se esté revisando nada relacionado con el trabajo, ¿es un descanso real el que se lleva a cabo a través de este tipo de ocio?

Es un debate abierto en la sociedad. Las cifras, son cuando menos, llamativas. Según datos de la consultora TNS, los españoles se pasan tres horas diarias enganchados a los dispositivos tecnológicos. Tiempo que aumenta si hablamos de los jóvenes de menos de 25 años. El estudio Desco-net-ta cifra en un 60 % a los españoles que no dejan el móvil ni cuando está de vacaciones.

Es más, ante tal situación se ha ido abriendo paso la moda de los hoteles donde hacer este tipo de detox digital. Son establecimientos, generalmente rurales, donde no existe, o es limitada, la cobertura y la conexión a Internet. La cuestión está en si la gente de verdad quiere y necesita desconectarse de todo para volver a conectarse de otra manera. Los expertos no llegan a ponerse de acuerdo, y en los hoteles lo primero que se hace es pedir la clave de la wi-fi. Entonces, ¿de verdad se necesita una desconexión digital?

El experto en nuevas tecnologías y profesor de Sistemas de Información, Enrique Dans, lo tiene claro: «Que alguien pretenda obtener un placer del hecho de desconectar de todo significa que el uso que hace de la Red no es adecuado». Y es que, quien más y quien menos, la mayoría mata las horas con el móvil en la mano: «La gente acude a la Red en momentos de descanso para buscar qué hacer, qué leer, para buscar información que no es la que habitualmente leo, y te oxigena, te aporta ideas». 

Encontrar el equilibrio

No es tan tajante el profesor de psicología clínica Elisardo Becoña: «Si el Facebook es para conectarse con familia y amigos no es nada malo siempre que no se haga en exceso, pero si uno se conecta para tener más noticias, más información de lo mismo, no está descansando. Los seres humanos tenemos que tener la capacidad de desconectar totalmente durante unas horas, unos días o unas semanas». Tal vez, la clave del asunto sea saber encontrar un equilibrio: «Se eu nun momento dado teño un minuto libre e o primeiro que se me vén á cabeza é conectarme ao móbil, entón hai que pór un interrogante. Agora se iso non é unha obsesión, non é algo compulsivo, é algo que ti poidas controlar, pois non ten importancia», afirma la psicóloga María Concepción Prado Álvarez. Hay quien desconecta conectándose y hay quien de verdad corta de forma radical con todo. Aunque de momento parece que estos últimos son los menos: «Quieres ir a relajarte y al final lo primero que pides es la clave del wi-fi. Hay gente que viene a desconectarse totalmente, pero la mayoría todavía no», comenta Lucía desde Do Artesanato. Incluso hay quien ha mejorado sus números desde que tiene conexión, como en el caso de Parada das Bestas. «Tuvimos que pagar nosotros la instalación porque era algo necesario para trabajar. La conexión supuso un cambio radical. Es más, te digo que al menos el 75% de las reservas ahora no podríamos hacerlas sin conexión a Internet». Aunque siempre se encuentra la excepción a la regla: «La gente ya viene sabiendo que la conexión no va bien aquí, pero se lo toman diferente, es decir, no se lo toman mal, no es algo que les vaya a estropear las vacaciones», dice Guillermo desde o Lar de Rabacallos.

Como todo, hay quien tiene sus defensores y sus detractores, y aunque lo que ahora se lleva es hacer las cosas detox, parece que por ahora vivir sin conexión aún no está lo suficientemente de moda.

AXA: los primeros en reconocer la desconexión digital

Hace unos meses, justo a principios de este año, entraba en vigor en Francia el derecho del trabajador a la desconexión digital, es decir, el derecho a no atender llamadas, correos o mensajes relacionados con el trabajo fuera del horario laboral. La ley obliga a las empresas de más de 50 empleados a negociar este derecho con los trabajadores, sin embargo no obliga a que se llegue a un acuerdo ni se establece ningún plazo para dichas negociaciones. Se trataría, por tanto, de un acuerdo entre las partes, de forma que dirección y representantes sindicales deberán llegar a un trato que tenga validez para uno o varios años. La decisión de la regulación llegaba después de que el 62 % de los trabajadores franceses se mostrase de acuerdo con una ley sobre tal cuestión.

A raíz de la iniciativa francesa, En Comú Podem, la formación integrada en la coalición Parlamentaria de Unidos Podemos, llevó al Congreso una proposición no de ley que instaba al Gobierno a establecer una regulación en este sentido. El PDCat volvió en marzo a introducir el tema con una pregunta dirigida al Gobierno, y el PSOE registró otra proposición no de ley volviendo a pedir una al Ejecutivo que regulase la desconexión digital, considerando que lo ideal sería una «constitucionalización de los derechos digitales». El Gobierno prometió estudiar esta posibilidad, aunque a día de hoy todavía no se sabe nada sobre el tema.

Este viernes la aseguradora AXA se convertía en la primera empresa española en reconocer el derecho a desconectar el móvil fuera del trabajo. La cláusula dice lo siguiente: «Salvo causa de fuerza mayor o circunstancias excepcionales, AXA reconoce el derecho de los trabajadores a no responder a los correos electrónicos o mensajes profesionales [por cualquier medio tecnológico], fuera de su horario de trabajo». Lo que, según dicen desde la empresa, ayudará también a conciliación de la vida laboral y familiar. La aplicación del convenio colectivo, firmado por CC. OO. empieza este año y se alarga hasta el 2020.

Estos no son los primeros ni únicos ejemplos. La empresa alemana Deutsche Telekom ya bloqueaba el acceso al correo de empresa desde las seis y cuarto de la tarde.

Por el momento, parece que habrá que esperar a la vuelta de las vacaciones para ver si finalmente los españoles tienen derecho a desconectar de todo una vez terminan su trabajo y llegan a casa.