Marck Zuckerberg eligió Lulea, una pequeña localidad costera al norte de Suecia. Aquí te explicamos las razones
30 abr 2015 . Actualizado a las 17:53 h.Lulea es una pequeña ciudad costera al norte de Suecia. Casi como otra cualquiera localidad de 75.000 habitantes bañada por el Bálñtico, en las que la gente suele pasar mucho tiempo dentro de sus casas resguardándose del frío y de las contadas horas de sol que imperan en estas latitudes. La única novedad es que acoge el mayor centro de data fuera de EE. UU.. Y que Facebook la eligió hace unos años para implantar su principal cuartel general al otro lado del Atlántico, en el que decenas de miles servidores que funcionan con energía hidroeléctrica obtenida del río local (Lulea, además de la más grande, también presume de ser la más verde, o menos contaminante) que procesan 10 petabytes al día. Para hacerse a la idea, un petabyte es una unidad de almacenamiento de información equivalente a 10 elevado a 15 bytes, es decir, nueve cuatrillones de bytes.
Mark Zuckerberg necesitaba espacio para guardar, clasificar y proteger toda la información que compartimos en Facebook, por lo que cada vez que posteamos una foto en la playa disfrutando de las vacaciones, un selfie en una cena con amigos, un «me gusta» al estado de ánimo de un viejo conocido o que estamos indecisos de si asistiremos o no a determinado evento, Zuckerberg toma buena nota. Teniendo en cuanta que tan solo en Europa Facebook cuenta con 282 millones de usuarios, se entiende que el edificio principal de este centro de data tenga una superficie de 28.000 metros cuadrados (alrededor de cuatro veces la compostelana Praza do Obradoiro). Pero, ¿por qué este sitio tan remoto llamado Lulea?
La respuesta se asienta sobre tres pilares fundamentales, probablemente parecidos en importancia entre ellos. El frío, la ubicación y la seriedad. Los servidores requieren de bajas temperaturas para un correcto mantenimiento, por lo que Almería quedó descartado. En Groenlandia hace mucho frío, pero no resulta práctico para enviar materiales o personal. Y por último, Suecia es una garantía.
Desde la instalación de Facebook en Lulea, esta población ha logrado duplicar su número de vecinos, el precio de la vivienda no cesa de crecer y crecer y hasta incluso han abierto sus puertas dos hoteles de cinco estrellas para alojar a los jóvenes ejecutivos de la compañía.
Ahora ya sabes en dónde se alojará el «me gusta» si decides valorar este artículo.