Miles de usuarios solicitan la retirada de este emoji de los estados de la red social por resultar ofensivo para las personas con trastornos alimenticios
10 mar 2015 . Actualizado a las 19:37 h.Hace unos meses, la caja del «estado» de Facebook, en la que los usuarios solían teclear opiniones varias, evolucionó hacia un cajetín algo más personal. En su interior, una pregunta recibe al internauta -¿Qué estás pensando?- y le invita a compartir con sus contactos sus razonamientos y sentimientos. Bajo ella, la opción de compartir imágenes, situarse en el mapa y dirigirse a otras personas a través del etiquetado. Un botón más da la oportunidad de completar el mensaje, de enriquecerlo. Se trata de los archiconocidos emoticonos, que en Facebook adquieren una nueva dimensión. Aportan una sensación, a través del emoji, que en esta plataforma va a compañada de un pequeño texto. Así, si el usuario escoge el símbolo de la cara sonriente, su mensaje se autocompletará con la frase «Me siento feliz». El catálogo de estados de ánimo es largo y diverso. Me siento entusiasmado. Me siento sensible, amado, molesto, enfermo, orgulloso, motivado, con resaca, ebrio, cabreado... Y, hasta hace unas horas, gordo.
El icono, la clásica cara amarilla tuneada con coloretes y papada, ya no integra la lista sentimental de Facebook. La red social se ha visto obligada a retirarlo después de que miles de usuarios de todo el mundo apoyasen en Change.org la campaña Gorda no es un sentimiento, puesta en marcha por la modelo Argentina Brenda Mato. La inciativa, que ya ha dado sus frutos, cuenta actualmente con 16.711 firmas.
«Todos los días trato de hablarme a mí misma para recordarme lo importante que soy. Por eso, cuando veo en Facebook el emoticon de "sentirse gordo" o "feo", es como si me empujara otra vez a volver a pensar que ser gorda es algo malo. Gorda no es un sentimiento. Y ni hablar de la fealdad. Qué mundo aburrido sería si todos tuviéramos los mismos gustos; lo que para mí es bello, puede no serlo para otros y al revés. No busco un cuerpo ideal. Yo ya tengo mi cuerpo ideal. Es el mío y lo amo por ello».
Así arranca el manifiesto de esta joven de 24 años, que, con una talla 50, se dedica al mundo de la moda. «Mi primer beso fue un logro para mí, y un calvario para el chico. Es muy difícil convivir con una sociedad donde siempre nos enseñaron que ser flaco es lindo y está bien; y que ser gordo es feo y está mal. Ya con eso cualquiera siente que puede tener derecho a opinar sobre nuestras vidas, y lo peor, comunicarlo sin despojos. Y un día desperté, entendí que el hecho de existir en un cuerpo gordo era una parte más de las tantas partes que soy y que mi cuerpo no tenía que ser una traba para todo. Entendí que la belleza está en ser único y no en acoplarse al montón. Soy bella por ser yo, y eso es lo más importante».
«Hay millones de personas en todo el mundo que sufren a diario por ser diferentes, y quiero que lo que aprendí sirva para generar un cambio positivo para todos -continúa la argentina-. Las redes sociales son una parte importante de nuestras vidas y no deben promover la discriminación o ideales nocivos. Por eso inicié esta petición, para que Facebook elimine de sus estados emocionales el "me siento gorda" y el "me siento fea"».
Dos peticiones
El mismo tono presenta una segunda petición, también en Change.org, y también contra el emoticono «gordo». La lidera la estudiante Catherine Weingarten, víctima de trastornos alimenticios durante años, y la apoyan 16.721 rúbricas. La grasa no es un sentimiento. «La grasa es una parte natural de nuestro cuerpo, sin importar su peso -argumenta Weingarten-. Y todos los cuerpos merecen ser respetados y cuidados». «Facebook es la red social más popular en el mundo ahora mismo. Con 890 millones de usuarios cada día, tiene el poder de influir en cómo hablamos sobre nuestros cuerpos. (...) Lo único que pido es que se deje de respaldar pensamientos autodestructivos con emojis aparentemente inofensivos».
La madrugada de este martes, el controvertido emoticono ha desaparecido de la lista de sentimientos de Facebook.