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El bitcoin sufre otra zancadilla

Toronto / EFE

OCIO@

Cierra un banco canadiense de esta moneda tras un robo «online»

05 mar 2014 . Actualizado a las 12:06 h.

Flexcoin, un banco canadiense de la moneda digital bitcoin, anunció ayer su cierre tras sufrir un ataque y «el robo» del dinero depositado on line, un total de 896 bitcoins, equivalentes a medio millón de euros.

Flexcoin es el segundo banco de bitcoin que cierra en los últimos días tras sufrir la desaparición de fondos. El 28 de febrero, Mt. Gox, el mayor banco de bitcoin del mundo y con sede en Japón, cerró tras el anuncio de que 850.000 bitcoins habían desaparecido.

La entidad canadiense emitió un comunicado en su página web en el que decía que «el 2 de marzo, Flexcoin fue atacado y sustraídas todas las monedas en el hot wallet (monedas online disponibles para rápidas transacciones)».

«El atacante se hizo con 896 de estas unidades», añadió el banco, que identificó las direcciones a donde fueron enviadas los bitcoins.

«Como Flexcoin no tiene recursos, activos u otras formas de recuperarse de estas pérdidas, estamos cerrando nuestras puertas inmediatamente», añadió la empresa, que aseguró que las monedas que no estaban online en el momento del ataque pueden ser recuperadas por sus propietarios y cuya cuantía no cifró. La empresa canadiense añadió que «intentará» colaborar con la policía y otras autoridades para identificar la fuente del ataque.

Bitcoin es una moneda digital creada en el 2009 y que no está respaldada por ningún activo, que es generada por algoritmos matemáticos sin la intervención de ningún banco o autoridad central.

Mientras, en Japón, tras el varapalo del banco Mt. Gox, el Gobierno reconoció ayer que no sabe cómo actuar, debido a la falta de regulación sobre la cuestión, ante la reciente quiebra de esta casa de cambio de bitcoins y la desaparición de una importante cantidad de moneda virtual. «No sabemos si es un delito o una bancarrota, y desconocemos qué ministerio o agencia debería hacerse cargo del caso», aseguró el ministro nipón de Finanzas, Taro Aso. La compañía con sede en la capital del país, Tokio, contaba con más de 100.000 clientes y de sus cuentas desaparecieron 850.000 bitcoins.