Patrocinado por:

R asegura que no cortará la conexión al usuario sancionado por descargarse archivos

La Voz REDACCIÓN

OCIO@

El operador gallego mantiene que le resulta imposible ejecutar la orden de la Audiencia Provincial de Barcelona al no poder identificar al cliente que se encuentra tras el nick

22 ene 2014 . Actualizado a las 19:30 h.

El operador gallego R abre un nuevo capítulo en la historia de la controvertida sentencia al usuario que se descargaba y compartía archivos 2P2. Después de que la Audiencia Provincial de Barcelona, amparándose en la actual Ley de Propiedad Intelectual, instase a la cablera a cortar la conexión del internauta de forma definitiva por piratería musical, R responde que le resulta imposible llevar a cabo la sanción al no ser capaz de identificar al cliente que se encuentra tras el nick «nito 75».

A través de su blog oficial, R aclara que inicialmente recibió la sentencia del juzgado de primera instancia que desestimaban íntegramente las pretensiones de los demandantes, por lo que, al no ser condenada en un principio a hacer o realizar acción alguna, «no tenía ningún sentido personarse en el procedimiento judicial».

Cuando la sentencia en segunda instancia, después de que los demandantes recurriesen, modificó la primera, R recibió la orden de suspender la prestación del servicio de acceso a Internet al usuario identificado con el citado sobrenombre. «Esta obligación resultará de imposible cumplimiento, ya que en R no podemos identificar a ningún cliente que se encuentre detrás de ningún nickname, como es el caso», sostiene el operador.

En la sentencia se explica que «nito 75» es un usuario «de un programa de intercambio de archivos entre particulares, de los conocidos como peer to peer (de igual a igual)», que incluye obras protegidas por los derechos de propiedad intelectual. «Ponen en contacto a personas conectadas a Internet con el fin de poder intercambiar todos y cada uno de los archivos que dichas persona tienen almacenados en sus ordenadores».

A través de una empresa especialista en investigar y detectar infracciones de los derechos de propiedad intelectual a través de la Red, los demandantes -Promusicae- constataron que el usuario «nito 75» contaba en su disco duro con un total de 5.097 archivos de sonido, «contenidos todos ellos en la carpeta compartida de su ordenador», lo que supone una falta que atenta contra los artículos 115 y 116 del Texto Refundido de la Ley de Propiedad Intelectual.

Además del nickname, los demandantes han aportado la dirección IP del usuario, lo que les ha permitido saber que es la cablera R la que presta el servicio al infractor.

La Asociación de Internautas, satisfecha con la respuesta de R

La reacción del operador gallego ha colmado las expectativas de la Asociación de Internautas, que, según informa Europa Press, considera adecuado que R se haya negado a cortar la conexión. Su presidente, Víctor Domingo, opina que la petición de la Audiencia Provincial de Barcelona es «tan extraña, como preocupante».

Domingo denuncia que desde el juzgado no se haya facilitado un nombre y unos apellidos a R. Además considera que «el problema de fondo para el operador es que les estaban quitando un cliente sin ninguna justificación», por lo que es positivo en este sentido «que no vayan dando ejemplos innecesarios».

De esta forma, Domingo manifiesta que desde la asociación «saludan con cierta esperanza la decisión de R», que «tiene que defender a un cliente» que se encontraba en «situación de indefensión». «No se sabe a quién quieren cortar Internet, si al padre, al hijo o al hermano de este nick», añade.

El presidente de la organización considera que R ha enviado un «aviso a navegantes», en relación a la nueva Ley de Propiedad Intelectual que se está tramitando en Cultura. Así, ha insistido en que las cuestiones que plantea este asunto, «como la privacidad o la protección de datos», no las puede solventar una Ley de Propiedad Intelectual. En esta línea, señala que en la asociación «no dudan» de que «se pueda cortar una línea si existe un delito», y, en este sentido, «tendrán que saber a quién se está cortando» y quién exactamente ha cometido la infracción.

Si R ha tomado esta decisión «habrán visto todas las posibilidades legales y tendrán todas las cartas», cree Domingo. «La decisión de la Audiencia Provincial de Barcelona ha sido un poco aleatoria y extraña; tan extraña como preocupante y lo que ha conseguido es reabrir el debate» y recordar «todos los problemas que hace tres años estaban agitando el sector de Internet».