Sony, Toshiba o LG ya lanzaron sus televisores de ultra alta resolución, cuyos precios están fuera del alcance del consumidor medio, a partir de 20.000 dólares en el caso de un televisor de LG, algo que seguirá siendo así durante los próximos años.
El incremento de la resolución de pantalla será una tendencia más que se verá en general en el sector tecnológico en años venideros, según explicó el director de investigación de CEA, Shawn DuBravac. Para DuBravac, la sociedad está entrando en una «segunda era digital» marcada por la conectividad entre dispositivos, los sensores en la vida cotidiana controlados a través de «smartphones»