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SIMO, donde las plantas aprenden a tuitear

Patricia Biosca / Colpisa

OCIO@

La feria de tecnología madrileña presenta las últimas soluciones para mejorar la eficiencia de las pymes con la tecnología móvil como máxima protagonista

26 sep 2012 . Actualizado a las 23:20 h.

Las plantas tuitean para que se les alimente, cantantes virtuales que dan conciertos como hologramas, usar el móvil como tarjeta de crédito o incluso guardar toda la información de un historial médico en una simple pulsera de plástico. Todo esto y más es posible gracias los avances informáticos que se pueden contemplar en la feria SIMO en el madrileño recinto ferial de Ifema, que exhibe 126 expositores con las últimas soluciones para mejorar la eficiencia de las pequeñas y medianas empresas con la tecnología móvil como máxima protagonista, vestida de aplicación informática.

Dell y HP se colocan en los grandes stands enseñando sus nuevos equipos con el sistema Windows 8, que aún no se comercializa. Además, el Ministerio de Educación y Ciencia de la Federación Rusa ocupa el centro del pabellón enseñando en España sus propuestas tecnológicas, como un robot que se mueve y habla según las órdenes que se le encomienden o la revolucionaria fotografía en 3D.

Pero las pequeñas empresas son las que más sorprenden al visitante novato en lides tecnológicas. Unas cajas de diez centímetros cuadrados son capaces de recoger toda la información relativa a humedad, viento, condiciones del suelo y posibles plagas de los campos de cultivo y mandarla a un ordenador para que el agricultor sepa en cada momento el estado de sus plantas. Esta es la idea de Bynse, empresa que ofrece servicios de Cloud Computing al sector agrario y que permiten no solo saber las condiciones de las plantaciones, sino que estas manden a través de Twitter mensajes sobre su estado. «Esta aplicación permite al agricultor ahorrarse costos como el fertilizante, que ahora se usa indiscriminadamente, u optimizar el servicio de riego automático, porque los datos dicen exactamente cuándo hay que hacerlo. Es una inversión inicial que a la larga sale rentable», aseguran desde la empresa.

Ya no es necesario tener una voz de tenor para poder cantar tus propias canciones y triunfar en el mundo de la música. Así lo demuestra otra de las herramientas informáticas presentes en la feria, Vocaloid, y que ya es todo un fenómeno en Japón. Este sintetizador de voz permite introducir una canción en el programa y que sus cantantes virtuales la interpreten como lo haría una estrella. Además, los investigadores que desarrollaron el software son unos catalanes de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. «Hemos estado estudiando esta tecnología durante diez años y ahora intentamos introducirla en España, aunque es difícil porque las culturas son muy diferentes», explica el representante de Voctrolabs, la empresa que intenta comercializar la idea.

De hecho, hay tantas diferencias que en Japón ya adoran a Miku Hatsune, una cantante virtual que utiliza este sistema y da conciertos de forma holográfica a los que acuden miles de personas, mientras que Bruno y Clara, la versión española de Hatsune creada por Voctrolabs, comienzan poco a poco hacerse hueco.

Pero las aplicaciones móviles son las grandes protagonistas de la muestra. Olvidar las llaves ya no es un problema, ya que a través del teléfono es posible abrir la puerta o incluso que te manden una copia a través de un mensaje gracias a tecnologías como la de Wiip! Esta empresa valenciana ha desarrollado los sistemas que se basan en la tecnología NFC, es decir, una interfaz de comunicaciones de corto alcance que permite el intercambio de información entre un 'smartphone' y un objeto que tenga una etiqueta con esta misma tecnología. Wiip! está dirigido a servicios aplicados al turismo, la sanidad, la seguridad y el automóvil.

Además, este año SIMO presta especial atención a la e-Administración, en concreto, a las mejoras en eficiencia del Ministerio de Justicia. Según el director general de red.es, Borja Adsuara, la modernización de la justicia ha supuesto una inversión de 185 millones de euros.