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Microsoft logra un nuevo récord de facturación y se mantiene por encima de Apple

EFE

OCIO@

Su histórica rival le pisa los talones después de haberla superado en capitalización bursátil.

23 jul 2010 . Actualizado a las 10:40 h.

Microsoft anunció hoy que Windows 7 le ha permitido batir su propio récord trimestral y anual de ingresos, con lo que se mantiene por encima de su histórica rival, Apple, que le pisa los talones después de haberla superado en capitalización bursátil.

La firma fundada por Bill Gates informó hoy de que en su último ejercicio fiscal (cerrado en junio) ganó 18.760 millones de dólares (2,10 dólares por acción), el 28,7% más que el año anterior.

En ese periodo facturó 62.484 millones de dólares, el 6,92% más que el año anterior y la cifra anual más alta jamás alcanzada por esta empresa.

Esos incrementos ponen de manifiesto el renovado interés de los consumidores por la tecnología ahora que la crisis remite en muchos países, así como la decisión de las empresas en volver a invertir en esta partida.

Sólo en el cuarto trimestre del año fiscal (abril-junio) ganó 4.518 millones de dólares (8,82 dólares por acción), un 48,37% más que un año antes.

En esos tres meses facturó 16.039 millones de dólares, un 22,44% más que entre abril y junio del año pasado, lo que supone el segundo récord consecutivo de ingresos trimestrales logrado por la empresa.

Ello se debió en gran parte a las ventas de su sistema operativo Windows 7, del que se han comercializado 175 millones de licencias desde que salió al mercado en octubre de 2009, dejando así atrás el fracaso que supuso la versión anterior, Windows Vista.

Las ventas de Windows en el trimestre alcanzaron los 4.548 millones de dólares, frente a los 3.169 de un año antes (un 43,5% más), mientras que las de Office y otro software para empresas pasó de 4.567 a 5.250 millones de dólares (un 15% más).

Los más de 16.000 millones de dólares ingresados entre abril y junio por Microsoft están por encima de los 15.270 calculados por los analistas y de los 15.700 de Apple, que difundió sus cuentas el martes.

Con estos datos se pospone al menos tres meses más la posibilidad de que el fabricante de los ordenadores Macintosh y de los teléfonos iPhone escale un nuevo peldaño en la histórica rivalidad que mantiene con Microsoft.

Mientras que esta última no ha ofrecido previsiones de ingresos para el próximo trimestre, Apple sí apuntó el pasado martes que va camino de ingresar 18.000 millones de dólares entre julio y septiembre.

Alcanzar a Microsoft en ingresos sería el próximo hito en la historia de ambas firmas, después de que hace dos meses la empresa californiana superara en capitalización bursátil a la creadora de los omnipresentes Windows y Explorer.

Al cierre del mercado electrónico Nasdaq, donde cotizan ambas compañías, el valor bursátil de Apple seguía hoy por encima, con 235.940 millones de dólares, frente a los 226.460 millones de Microsoft.

Nacida en 1975, Microsoft logró la introducción de su sistema operativo Windows y su grupo de programas Office en prácticamente todos los ordenadores del mundo e hizo que la competencia con Apple, creada tan sólo un año después, fuera inicialmente una cuestión casi anecdótica.

Apple siempre había sido vista como la empresa marginal que fabricaba ordenadores para un sector muy concreto de la población, los Macintosh, que además eran más caros que los ordenadores personales (PC).

Sin embargo, con la revolución que supuso en el mercado el lanzamiento de dispositivos como iPod y iPhone, Apple dio un salto de gigante que ahora pretende prolongar con su ordenador plano iPad.

Así, mientras que Microsoft fue claramente la hermana triunfadora en los años de la infancia, ahora que ambas empresas son unas treintañeras la situación se ha igualado enormemente, de forma que la valoración que merecen a los mercados es prácticamente la misma.

En los últimos años, Microsoft se ha tenido que enfrentar a innumerables problemas relacionados con su posición dominante en el mercado del software y a una tremenda piratería de sus programas.

Su actual reto consiste en reducir su dependencia de Office y Windows y encontrar un nuevo mercado donde despuntar con fuerza y ganar impulso si se quiere mantener como la mayor empresa de software.